El Balonmano Pozoblanco rompió el pasado fin de semana una racha de casi dos años sin ganar fuera de casa. Y lo hizo en casa de un equipo, el Octavio, que el pasado ejercicio jugaba en la Liga Asobal y que en éste pelea por regresar a la misma, con varios lesionados que no pudieron estar y uno más que se unió en el partido, el frances Mathieu, y pese al cansancio acumulado por el largo viaje de madrugada hasta Galicia.

No se puede ocultar que ésta es una de las semanas de mayor euforia en Pozoblanco en meses, como revela el capitán Nacho del Castillo. «Somos un equipo que se crece ante las adversidades. Planteamos un partido muy incómodo para Octavio, que en ningún momento consiguió meterse del todo. Nosotros lo leímos muy bien y supimos darle el ritmo que nos convenía en cada fase», explicó. «Es una victoria sobre todo moral y psicológica, que hace que por fin nos demos cuenta de que no es imposible ganar fuera y que si lo hemos hecho contra un equipo ex de Asobal y candidato al ascenso lo podemos hacer contra cualquier conjunto».

Considera Nacho que los dos puntos «nos da alas de cara al importantísimo partido frente a Torrelavega de la próxima semana en Santander»,aunque, yendo por partes, antes hay otro partido clave contra Bordils. «Sin duda alguna. Es un duelo vital para amarrar la permanencia. No sólo porque si puntuamos nosotros podríamos dejar a nuestros perseguidores a cinco puntos, sino también porque si ganas adelantas a Bordils y lo metes de lleno en la lucha por el descenso. Si lo sacamos adelante tendremos gran parte del trabajo conseguido».

Ve «factible» acabar en la zona media

Los catalanes no son un rival fácil, pese a que vayan perdiendo posiciones con el paso de las jornadas. «Sinceramente Bordils fue el equipo que más me sorprendió en la primera vuelta, donde llegó a estar incluso segundo. Destaco el alto ritmo e intensidad que ponen a sus partidos, y que son muy rápidos y contundentes en su segunda oleada. No tienen demasiado trabajo estratégico, pero lo que hacen lo hacen muy bien y bien trabajado. Quizás pagan que en esta segunda vuelta los equipos ya los conocen y saben cómo jugarle y afrontar los partidos contra ellos».

Sin hacer cuentas de la lechera, sacar el duelo de este sábado y no perder en Torrelavega podría meter incluso al equipo en la zona media o media-alta de la tabla. «Fíjate lo importante que es ganar fuera, que encadenando dos jornadas seguidas sacando los dos puntos nos ponemos a tiro de piedra de equipos como Barakaldo y Antequera, que jornadas atrás se veían muy lejos y dificiles de alcanzar», señaló. «Si mantenemos este ritmo que llevamos en la segunda vuelta, tres victorias de cuatro posibles, veo muy factible ponernos delante de estos equipos, que van desinflándose un poco y no tienen mucho margen de mejora. Pero para ello tenemos que hacer bien nuestro trabajo».

De «menos a más» en lo personal

En cuanto a su labor personal, el jugador se ve «de menos a más». «Ése es mi balance: ir cada dia un poco mejor, recuperando sensaciones de la temporada pasada y siendo importante para el equipo, que ante las recientes bajas necesita el 100% de todos los disponibles. Si sigo con la regularidad de los ultimos partidos acabaré la temporada muy satisfecho», aseveró.

Del Castillo quiso precisamente acordarse de sus compañeros lesionados, Carreño, Adrián y el último, Mathieu, a los que mandó «ánimo en su recuperación porque los necesitamos», además de mandar un mensaje a la afición vallesana. «Me gustaría hacerles un llamamiento para que sea consciente de lo mucho que nos jugamos este sábado. A llenar el Sepúlveda».