De momento, el jugador ayudará al equipo en los próximos dos-tres partidos aunque la gravedad de algunos lesionados podría alargar su compromiso con la entidad

El Balonmano Pozoblanco ha movido ficha tras el aluvión de lesiones que está padeciendo el equipo y ha fichado a todo un histórico para la entidad vallesana. Nacho Serrano ha llegado a un acuerdo con el club para sumarse a una plantilla muy mermada y a la que espera ayudar en los próximos dos o tres partidos, ya que la idea primitiva de la directiva y el jugador es que éste aporte mientras las lesiones permiten ir recuperando a jugadores. 

Un compromiso que podría alargarse tras conocerse el alcance de la lesión del francés Mathieu, que tras realizarse una resonancia se le ha diagnosticado rotura del ligamento cruzado de la rodilla derecha por lo que se perderá lo que resta de temporada. A la lesión del francés hay que sumar la de Adrián Santamaría, con rotura de ligamentos en el tobillo, y al esguince de grado III de Ángel Povedano, al que todavía no se le ha retirado la escayola.

Esta situación ha provocado que la directiva recupere para el equipo a un hombre que a sus 40 años espera aportar su experiencia y que se sumará a los jugadores que se midan mañana al Handbol Bordils. Nacho Serrano conoce a la perfección a un club al que estuvo ligado durante seis temporadas y que abandonó, para dejar el balonmano, en la temporada 2010/2011. El jugador se reencontró con la afición blanquilla, con compañeros y demás el pasado 11 de enero cuando acudió a la jornada de convivencia organizada por el club y donde se dieron cita «viejas glorias».

Por aquel entonces, el lateral derecho que puede jugar también de extremo, reconoció que el club se había puesto en contacto con él durante la pretemporada y que no se había alcanzado un acuerdo, algo que parece que sí ha ocurrido en estos momentos en los que el equipo necesita refuerzos.