Hay ganas de que se acabe la legislatura y que las cartas de juego vuelvan a repartirse. Visto lo visto ayer en el apartado de ruegos y preguntas del pleno del Ayuntamiento de Pozoblanco el balance positivo que se puede hacer es que se vivió un pleno más, por lo que queda uno menos para que esta legislatura sea historia. Nadie asegura que la próxima será mejor, pero al menos habrá una nueva oportunidad de asignar roles, de elegir y de nuevos planteamientos que saquen a Pozoblanco del bucle en el que anda metido.

Un bucle que nos vuelve a llevar a hablar de la Policía Local y sus problemas con el alcalde, al que llamaron mentiroso colocándose una careta con su cara y una nariz alargada emulando a Pinocho. Las discrepancias se extendieron a Benito García, que ayer centró gran parte del pleno entre disculpas y rectificaciones a medias y por el ser el protagonista de un escrito que el Jefe de Policía ha entregado al alcalde y resto de portavoces y donde carga contra el primer teniente alcalde por sus declaraciones en el pleno del mes de julio donde vino a decir que el citado cargo omitía las órdenes que se le daban por su parte.

Un escrito del que poco trascendió pero al que el alcalde no dio mayor importancia porque se trata de «algo personal». Un argumento que provocó caras de asombro entre la oposición por entender que no se trata de nada personal, sino una problemática entre un funcionario y un concejal en la que hay por medio una petición de actuación al máximo responsable del Ayuntamiento, Pablo Carrillo. Pero no estaba ayer el alcalde por la labor de asumir responsabilidades o fallos. ¡Qué va!

Y eso que la oposición insistió en eso de pedir responsabilidades por el tema del autobús municipal, pero nada, las responsabilidades quedan para la inspectora que estaba trabajando por una supuesta mala comunicación, para los periodistas que cuentan lo que no deben o para cualquiera que pase por allí. Total que el «debate» entró en otro bucle, en ese de «Manzanas traigo, a qué precio, coloras» o como se dice por aquí «que si quieres arroz Catalina».

¿De lo demás? Pues que por tercer pleno consecutivo se pidió el informe sobre las denuncias presentadas por el Club de Natación y por lo visto ya queda menos para que se les pase a los concejales; que ya queda menos también para que se ocupe la plaza de vicesecretaria aunque el procedimiento para ello ha levantado las ampollas de la oposición por las artes no del todo claras del proceso; que el tema de la limpieza de las calles sigue sin arreglarse y mucho menos el de los palomos, y… Eso, que estamos en bucle.