Era un puro trámite pero había que cumplirlo. El salón de plenos del Ayuntamiento de Pozoblanco vivió ayer su última sesión con la actual corporación y la última presida por el que a día de hoy es alcalde en funciones, Pablo Carrillo. Un pleno donde tan solo hubo que proceder a la aprobación de las actas de la última sesión que se aprobaron sin ningún tipo de problema.

Luego, fue el momento de que Carrillo se despidiera agradeciendo a sus compañeros de corporación, a los trabajadores del Ayuntamiento y también pidió perdón por los errores que pudiera haber cometido. «Las personas pasan, las instituciones quedan y estoy convencido de que nadie es imprescindible, ahora toca el turno a un nuevo equipo de gobierno que estoy seguro que se dejará la piel por conseguir lo mejor por Pozoblanco», expuso.

Fue un día de despedidas y es que de la foto de ayer tan solo repetirán dos concejales en esta nueva legislatura, el popular Manuel Cabrera y la concejala del CDeI, Francisca Fernández (Benito García se ausentó por motivos laborales). Así, fue un día para decir adiós a toda una histórica, Carmen Blanco, que tras veinte años como concejala no repetirá. Algo menos han estado sus compañeros de formación, ocho, Baldomero García, Ventura Redondo y Bernardo Ruiz que junto a César Bravo, Juan Bautista Carpio, María José Espejo, Pilar Fernández, Manuela Calero (que se ausentó por motivos personales), Josefa Márquez y Miguel Ángel Carrasco dijeron adiós a esta etapa política.