Una lucha porque no olviden y no se les olvide, eso es lo que se respira en la sede de la Asociación ‘Recuerda’ que hoy, Día Mundial del Alzheimer, vive de una manera muy especial su trabajo diario. Nos abren las puertas, como tantas otras veces, aunque esta vez con más protocolos, con más medidas de seguridad porque la unidad de estancia diurna de ‘Recuerda’ no es ajena a la realidad que se vive. Los pacientes de Alzheimer y sus familiares conmemoran este día con el recuerdo de un confinamiento que ha pasado factura en el deterioro cognitivo y cuyos efectos se han intentado minimizar. Para eso está el grupo humano que hay detrás de una Asociación que volverá a correr por los que olvidan, aunque se tengan que adaptar a las circunstancias. 

«El confinamiento ha hecho mella, como en todo el mundo. Nosotros trabajamos con personas mayores, el colectivo más vulnerable, a eso hay que unir el deterioro cognitivo. Nosotros insistimos en que las personas mayores tienen que salir, relacionarse y durante el confinamiento ha ocurrido todo lo contrario, algo que también ha ido en detrimento de su movilidad provocando un mayor deterioro en la misma», explica la presidenta de ‘Recuerda’, Salomé Moreno. 

Entre las historias que contará este colectivo será el cierre obligado, la realidad laboral de sus trabajadores, pero también la de sus usuarios y sus familiares que dijeron adiós a su rutina, a su «respiro», a esa atención especializada y profesional. El día 13 de julio el centro volvió a abrir sus puertas y con ello una serie de medidas y protocolos mucho más difíciles de aplicar con pacientes de Alzheimer. «Es muy bonito decir que tenemos que ponernos mascarillas, lavarnos las manos, pero es muy complejo hacerlo entender a personas con deterioro cognitivo, el obligarles les puede llevar a conductas más irritables», apunta Moreno.

El parón, sin embargo, no vino a significar un olvido y una despreocupación porque las familias han podido encontrar la mano tendida de un personal que tan solo espera que no vuelvan esos meses de encierro. Es vital para los pacientes y sus familias y aquí juega un papel fundamental la Asociación ‘Recuerda’, que es testigo de una enfermedad que poco a poco ha conseguido dejar de ser estigmatizada lo que ha provocado que las personas que la padecen se acerquen antes y el trabajo con ellas sea más efectivo. «Ahora hay usuarios mucho más autónomas y eso es importante para nosotros y también para los otros usuarios porque les motiva, les viene bien», señala la directora del centro, Ángeles María Huertos. 

Carrera

El coronavirus lo ha paralizado casi todo, pero no la actividad de una asociación que este año también correrá por los que olvidan. El carácter solidario de la cita continúa, pero esta vez los 4 kilómetros los elige hacer cada participante cuándo y cómo quiera. Se trata de colaborar con una aportación que permita engrasar el funcionamiento de un colectivo cuyo trabajo nunca será olvidado. 

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