Arranca la segunda vuelta en Tercera División lo que significa que el Pozoblanco se medirá al Castilleja, un equipo ante el que se reencontró con la victoria en el partido que enfrentó a ambos equipos en la primera vuelta. No fue en la primera jornada de liga, ya que la misma se aplazó por el coronavirus, pero fue un partido clave para un Pozoblanco que ya con Emilio Fajardo en el banquillo saboreó de nuevo el triunfo, algo que quiere repetir después del traspié ante el Córdoba B.
Un partido del que el técnico del Pozoblanco quiere olvidarse porque «la derrota es parte del juego» y es «lógico caer cuando se arriesga», por lo que el preparador se queda con ese choque para «aprender de los errores». Por eso, las opciones de los blanquillos ante el Castilleja pasan por no regalar o conceder minutos a su rival, algo que sí ocurrió ante el filial blanquiverde. «Es cierto que nosotros no podemos bajar el ritmo de juego, no podemos regalar ni un minuto porque no somos un equipo que podamos conceder eso a nuestros rivales», explicó Fajardo.
El técnico se mostró optimista de cara al próximo partido liguero, tan optimista como consciente de lo que tiene que hacer su equipo para intentar sumar los tres puntos. «Jugamos en un campo pequeño, de césped artificial, lo que provoca que no podamos tener ni un minuto de relajación, tenemos que estar los noventa minutos concentrados porque cualquier error en un balón largo te planta en área contraria», apuntó. Las claves del choque pasarán, por tanto, por trabajar «bien los duelos en primera jugada, estar muy atentos en las segundas jugadas, ser rápidos, contundentes atrás y tener efectividad en las ocasiones que tengamos».
Fajardo no quiso desvelar sus cartas para no dar pistas a su rival, aunque todo apunta a que la dupla de centrales estará conformada por Rubén Sánchez y Rafa, tras la baja por acumulación de amarillas de Santacruz. Otra cosa es como solucione la baja en el centro del campo de Iniesta, que es baja tras ser expulsado ante el Córdoba B, aunque el técnico se muestra satisfecho porque «todos los jugadores están entrando y siendo partícipes y eso nos da ventaja». Así, Emilio Fajardo armará a su mejor equipo posible para intentar sumar tres puntos ante un rival que le intentará jugar lento de lo que tendrá que huir un Pozoblanco que desea reencontrarse con la victoria.
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