Tras dos fines de semana sin competición en el Grupo Sur de la Liga Reto Iberdrola, que no ha sido tan así porque se han ido jugando diferentes envites aplazados, este martes regresa a la acción el Pozoalbense Femenino. Las pupilas de Antonio Serrano ‘Chico’ tienen un envite crucial, ya que de ganarlo abandonarían mucho tiempo después la zona de descenso directo a Primera Nacional y se pondrían a seis puntos del último puesto de plat-off de permanencia. Y esa situación llegaría justo antes de un duelo directísimo el sábado frente a La Solana, que sería el equipo que caería momentáneamente a ese puesto decimoquinto.

Con un cambio de entrenador tan reciente, no se puede negar que estas semanas han ido bien en el seno del Pozoalbense. «La semana inicial, contra el Juan Grande, no tuvimos mucho tiempo para plasmar todo lo que queremos buscar y ahora hemos tenido un poquito más para ir metiendo conceptos y un poquito de físico, que creíamos que debíamos subir el nivel. Las chicas trabajaron bien, con bastante fuerza, y esperemos que nos haya ido bien para afrontar el partido con garantías», indicó Chico a Canal 54 de Pozoblanco.

Es cierto que el Femarguín, ahora mismo octavo con 24 puntos, sí ha competido en estas semanas, por ejemplo con un empate sin goles ante el Real Unión de Tenerife. «Ellas llegan con competición en las piernas y eso es súper importante. Nosotras llevamos dos semanas sin competir y eso se va a notar, aunque las jugadoras sí han peleado en cada entrenamiento. Sabemos que cuando viene un entrenador nuevo todas quieren meterse en el once titular. Es verdad que esos tres partidos en una semana de ellas les dará un plus, pero estamos con ganas de darlo todo el martes», indicó el preparador.

Enemigo peligroso

Además, el equipo de Arguineguín es de los buenos en esta liga, tanto que de vencer se pondría sexto, por delante del Córdoba Femenino, por ejemplo. «El Femarguín es un equipo muy compacto, que lleva varios años manteniendo su columna vertebral. Tiene jugadoras como Astrid, que son diferenciales, o Cora o Patri Estupiñán arriba, notables en la categoría», advirtió Chico. «Son muy rápidas a la contra y sabemos que defienden muy bien y reciben muy poquitos goles, con esa mordiente arriba. Nosotras intentaremos mantener la portería a cero y hacerles daño con nuestras armas», añadió.

En ese sentido, espera el técnico ver un equipo más de su gusto que el que compitió en el debut. «Frente al Juan Grande jugamos un poco más defensivamente y más cerrados de como lo vamos a hacer normalmente. No es jugar a pecho descubierto, pero en tres días no pudimos meter los conceptos que hubiéramos querido», explicó. «Ahora queremos ser más protagonistas con balón y tener el tempo del partido, no lo que pasó con Juan Grande, que lo lanzábamos muy rápido arriba. Debemos tener la paciencia suficiente para hilvanar las jugadas y encontrar el espacio oportuno. Con apenas tres días pensamos en portería a cero, hacer daño y si no puntuar. Ahora se van a ver otras cosas, como dónde hacer daño, cómo replegarse o dónde hacer la presión».

Sin ausencias

El equipo ha preparado el duelo en el Álvaro Medrán de Dos Torres, por la resiembra del Municipal de Pozoblanco, con la única duda en estos días por ligeras molestias de la centrocampista Cristina Díaz, uno de los refuerzos invernales. Chico valora tocar el once, aunque no el estilo. «Confío en las 20 y ellas saben el modelo de juego. Estén quienes estén va a ser el mismo. Jugará la que mejor haya entrenado o esté en mejores condiciones, pero también la que las características del rival permita poner», apuntó.

Y puso un ejemplo gráfico: «El otro día en el centro del campo pusimos a Andrea Ríos porque tiene un buen desplazamiento de balón, pero a lo mejor contra el Femarguín buscamos otra cosa. Jugará la idónea, aunque es verdad que cuando las cosas funcionan se tocan poco. Lo bueno es que jugadoras que se quedaron en el banquillo han entrenado con unas ganas y predisposición gigantesca y se están ganando el puesto. Si confías en las 20 debe haber cambios».