Las actividades organizadas por la Asociación Los Pedroches por la República dentro de la Primera Republicana finalizaron con la presentación de la segunda edición del libro ‘Joaquín Pérez Salas y la Batalla de Pozoblanco’, de Laura López Romero. Un libro mantiene el prólogo de Fernando López López, pero que añade un prólogo a la segunda edición firmado por el historiador Manuel Vacas Dueñas y que encuentra, entre las novedades, la inclusión de un anexo donde se profundiza en los vestigios de la Batalla de Pozoblanco. La reedición de este libro, editado por la Asociación Los Pedroches por la República y financiado por la delegación de Memoria Democrática de la Diputación de Córdoba, sirvió también para homenajear a los hermanos López López por su trabajo de documentación e investigación.
La segunda edición del libro fue presentada por el vicepresidente de la Asociación, Miguel Calero, y el historiador Manuel Vacas. El primero destacó en su intervención las figuras de Ángel y Fernando López López, al igual que indicó que esta nueva edición está enfocada a las generaciones más jóvenes. Tomó el relevo Vacas, que siguió en esa misma línea antes de profundizar en la obra, resaltando el «trabajo titánico» de los hermanos López porque «consiguieron sacar del olvido muchos testimonios y gracias a ellos podemos conocer cómo se vivió la Guerra en la comarca».
Sobre el contenido de la obra, el historiador destacó la internacionalización del conflicto que se vivió en la Batalla de Pozoblanco con la presencia de la XIII Brigada Internacional o el XX Batallón Internacional. Del mismo modo, resaltó el condicionamiento de la vida con la estabilización del frente, es decir, la organización que se realiza en torno a ese frente que se tiene tan cercano, al igual que esa estabilización permite que se sucedan acontecimientos o que lleguen personas de relevancia a la zona. Por último, Manuel Vacas puso en valor la figura de Pérez Salas «un personaje cuanto menos digno de estudio, una persona más bien conservadora que fue consciente de que había jurado lealtad a la República y así se mantiene hasta que fue fusilado».
Por último, Vacas quiso detallar los «diferentes prismas» desde los que se viene estudiando la Guerra Civil en los últimos años centrados más en cuestiones sociales que en las bélicas. Es decir, aspectos como el reclutamiento forzoso o la influencia de las drogas, que provocan que esas miradas se sitúen más en las experiencias de vida que en las biografías.
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