El Sindicato de Estudiantes ha convocado una huelga general estudiantil hoy 27 de octubre en defensa de la salud mental de los alumnos y «contra la destrucción de la educación pública», así como manifestaciones programadas para las 12.00 horas en diferentes ciudades. La organización ha advertido de que «millones de jóvenes» sufren una «epidemia de enfermedades mentales sin precedentes», como los trastornos de ansiedad y de conducta alimentaria, las depresiones, una tasa de suicidios «insoportable» o un «elevadísimo» consumo de psicofármacos, que «suponen una agresión contra la juventud inaceptable».

Para el sindicato, esta «pandemia silenciosa es una lacra social derivada de un sistema capitalista que niega la posibilidad de tener una vida digna». En este punto, ha señalado que el paro, la precariedad, los precios de la vivienda o una enseñanza pública «bajo ataque y que alimenta el fracaso escolar, tienen un efecto gravísimo» sobre la salud mental de los estudiantes y la de sus familias.

«A todo ello hay que sumar una sanidad pública desbordada y sometida a recortes infames. Recibir atención psicológica en los hospitales públicos se ha convertido en una carrera de obstáculos, con listas de espera eternas y centros sin suficientes profesionales en salud mental. Ante este colapso, nos quieren obligar a desembolsar miles de euros en consultas privadas, para que grandes empresas se forren a costa de nuestro sufrimiento», ha criticado el Sindicato de Estudiantes.

En este contexto, la entidad ha criticado que el Gobierno y las comunidades autónomas «hablan mucho de la educación pública y la salud mental, pero luego dedican a esta emergencia social la miseria de 100 millones para solventar un problema que exige miles». «Nuestro futuro y nuestras vidas están en juego. Solo luchando, con el apoyo de nuestros profesores y familias, levantaremos un gran movimiento social para que se tomen todas las medidas que necesitamos para proteger nuestra salud mental y defender la educación pública», ha sentenciado el Sindicato de Estudiantes.

Entre sus reivindicaciones, destaca un «aumento drástico» de los recursos en salud mental para «llegar al menos al 15 por ciento del gasto total en salud (actualmente es del 5 por ciento)», la creación de «miles de plazas» de psicología y psiquiatría en la Atención Primaria, en Hospitales, y en los colegios, institutos y facultades públicas. Del mismo modo, reclaman una educación pública cien por cien gratuita desde Infantil a la Universidad; la gratuidad total de libros de texto; la supresión de las tasas académicas en FP y Universidad; y un plan de inversión del 7 por ciento del PIB.

«Por un puesto de trabajo digno al acabar los estudios o subsidio de desempleo para todos los jóvenes. No es posible tener una buena salud mental con salarios de miseria y contratos que nos impiden tener vida social. La salud no puede seguir siendo un privilegio de clase ni un negocio, deben estar al servicio de las necesidades sociales», ha concluido el sindicato.