Sigue sumando años a base de ediciones donde se sigue sacando pecho de una actividad que nació como una propuesta que se ha convertido en la cita veraniega de Los Pedroches. Las Olimpiadas Rurales de Añora encendieron el viernes su llama para, a base de juegos tradicionales, buscar a sus mejores competidores. Eso sí, el pódium final no marcará un fin de semana caracterizado por la diversión y el compañerismo que llena cada calle de la localidad noriega. 

Hubo desfile olímpico y una gala inaugural donde la música estuvo muy presente, así como el espíritu que marcan las propias Olimpiadas durante sus tres días de desarrollo. El alcalde de la localidad, Bartolomé Madrid, inauguró una actividad que deja un impacto económico en el municipio incuestionable ya que se convierte en el epicentro de toda la comarca y la provincia porque los equipos siguen llegando desde diferentes puntos. 

Después de las tres pruebas que marcan el primer día, a piola, garrote y cucaña, el grueso de la competición queda reservado para la jornada del sábado donde la diversión sigue asegurada. Tocará cambiar cromos para completar el álbum, hacer frente a los mizos, los zancos o las cintas. Lo de cada edición, pero de manera tan diferente que no deja de ser especial cada año. 

Las cifras de las Olimpiadas

Las grandes cifras de las Olimpiadas se repiten porque se decidió limitar la participación a 48 equipos para garantizar calidad en la organización y lograr unos tiempos de ejecución razonables. Así, hay un sistema de descansos, ascensos, descensos y solicitudes de acceso a la competición que permiten una renovación del plantel de participantes. Los 48 equipos suman 960 participantes, a los que hay que sumar algo más de 100 voluntarios y personal el Ayuntamiento y de empresas auxiliares implicadas en la organización. Son 16 pruebas, que terminarán mañana con el pingané, la comba y el porteo de cántaros, sin duda la ‘maratón’ final de esta peculiar cita olímpica. Tras los cántaros, se celebrará la ceremonia clausura y la entrega de premios.