El Pozoblanco afronta una complicada salida para visitar al Cartaya en la jornada dominical (17:00 horas). Las victorias conseguidas en las últimas jornadas han vuelto a dar alas al conjunto pozoalbense, que no quiere perder comba y seguir estando en los puestos privilegiados.  

Para el técnico del equipo vallesano, Alberto Fernández, rascar puntos en el estadio Luis Rodríguez Salvador no será nada fácil. “Es un campo histórico, me trae buenos recuerdos, pero es un campo complicado, estamos ante un gran rival con un grandísimo entrenador al que le tengo admiración y respeto”, indicó en las horas previas al partido.  

Fernández diseccionó a su rival destacando a “Manuel, un lateral derecho profundo que es un grandísimo jugador; Cerpas es un lateral izquierdo que tiene gol; Lolo es determinante en el equipo, creo que un porcentaje de nuestro éxito estará en pararle; Rufete es una de las sensaciones del año; y Palma es un jugador que lo da todo”. En definitiva, y en sus propias palabras, “es un equipo hecho a imagen y semejanza de su entrenador”.

Aunque queda el 3-0 del partido de la primera vuelta, Fernández instó a “olvidarse” de ese resultado porque “el choque no tendrá nada que ver”. “Ningún equipo se está pareciendo al de la primera vuelta, a excepción del Sevilla C”, argumentó. El preparador está centrado, entre otras cuestiones, en introducir cambios en su defensa porque “nos marcan goles muy evitables, necesitamos que ningún jugador crea que tiene el puesto asegurado”.  

En cuanto a las bajas, Carlos Moreno está a la espera de conocer la gravedad de su lesión, mientras que Alberto Páez ya ha comenzado a correr. El resto del equipo estará a disposición del técnico.