Nueva oportunidad la que tendrá mañana el Club Deportivo Pozoblanco (17:00 horas) en su feudo para sumar sus primeros puntos. Para conseguirlo tendrá que doblegar o al menos conseguir un empate ante un Alcalá que viene de conseguir el triunfo en sus tres últimos compromisos ligueros y que, por lo tanto, está en la zona alta de la tabla -quinto- todo lo contrario que su rival, que intentará también dejar atrás el cero en goles materializados y romper esa racha negativa.

No lo tendrá fácil un Pozoblanco al que se le acumulan los inconvenientes. Al lógico estado anímico tras no conocer aún la victoria ni sumar se une el hecho de que la enfermería blanquilla ha vivido una semana intensa, a lo que hay que unir los problemas laborales que tienen algunos jugadores, una situación que ha llevado a decir al técnico Mario Rojas que «quizás hemos vivido la peor semana a nivel de entrenamientos desde que comenzamos».

Un Rojas que sigue buscando las fórmulas idóneas para los suyos. Entre las posibilidades que baraja es la de adelantar a Fran y colocarlo en la posición de centrocampista, aunque no es algo seguro porque «puede ser muy arriesgado colocar a Félix y Paleta desde el inicio». Y es que el primero de ellos ha reducido sus entrenamientos por el comienzo de los estudios, mientras que Paleta será baja hasta última hora por las molestias que arrastra. Unas molestias que también impedirán la participación de Pedro Macareno y Juanjo, además del ya conocido Raúl Trujillo. Además, la situación de Macareno podría complicarse por temas profesionales y el club podría plantearse «hasta su baja».

Con estas adversidades e intentando dejarlas atrás, el Pozoblanco intentará parar a un Alcalá que «es un equipo que ha cogido la forma, con jugadores muy rápidos que realizan muchas transiciones ataque-defensa y defensa-ataque», explicó el entrenador de los vallesanos que también apuntó que «tenemos que tener mucho cuidado a la hora de perder balones en el centro del campo porque es un equipo que reestructura rápidamente el juego hacia arriba y puede crearnos muchos problemas». Peligros al que se sumaran dos de sus hombres de arriba, Salvi y Boris, ya que ambos han conseguido seis -tres cada uno- de los nuevo tantos conseguidos por su equipo hasta la fecha.

Constancia y dureza

Una situación a la inversa que la que vive el Pozoblanco, que aún busca su primer tanto en liga. Una situación que no preocupa en exceso a Rojas porque «es cierto que fuera de casa la distancia entre líneas dificulta que hagamos más ocasiones, pero en el partido de casa tuvimos varias». Eso sí, es consciente de que una incorporación en esa zona no le vendría nada mal. Como tampoco que los suyos tuvieran una poca más de decisión porque «entran con mucha dejadez, muy débiles. Sabemos que somos un equipo que como no sea como trabajo nos va a costar salir mucho de donde estamos».

«Luego hay jugadores que se quejan de su posición, pero si queremos aspirar a conseguir nuestro objetivo tenemos que utilizar nuestras armas y para eso hay que venir siempre con intensidad y concentración», puntualizó un Mario Rojas que mañana puede estrenar su casillero de victorias con este Club Deportivo Pozoblanco.