Sensaciones encontradas las que dejó el Club Deportivo Pozoblanco en su partido frente al Alcalá. No mereció, ni de lejos, perder el conjunto de Mario Rojas que igualó hasta en dos ocasiones un partido en el que, sobre todo en la primera mitad, llevó la voz cantante. La diferencia volvió a estribar en dos cuestiones, la debilidad y los fallos en defensa y el perdonar arriba. Esa fue la clava del choque. El Pozoblanco perdonó en varias ocasiones y el Alcalá casi cuenta sus llegadas por goles. Le toca a los blanquillos seguir trabajando, aunque se van con la sensación de que a su afición la tienen a su lado porque los dos goles de Miguel Silva se celebraron como una auténtica fiesta. Esa racha negativa, la de estar sin marcar, al menos se rompió.

Mario Rojas siempre ha dicho que en casa le gustaría que los suyos salieran a por todas y esta vez cumplió su máxima porque fue el Pozoblanco el que mandó en los inicios del partido, aunque sus errores defensivos volvieron a conceder demasiadas facilidades a un Alcalá que pronto los aprovecharía. El primer «regalo» de los blanquillos llegó en el minuto 9 con una mala entrega de Félix Leal que no acabó en nada porque Salvi se escoró demasiado y la zaga vallesana se rehizo bien.

Aunque en el partido ante el CMD San Juan los locales ya dieron muestras de que aunque se les resistía el gol tenían llegada, esta vez esas muestras llegaron mucho antes. La primera la protagonizó Sancho en el minuto 10 en una jugada dentro del área en la que el jugador se marchó hasta de dos defensas con varios recortes, aunque falló en la ejecución con un disparo alto cuando Álex Gil estaba solo. Dos minutos después fue Paleta el que se animó con un disparo raso desde la frontal del área que se marchó a la izquierda de la meta defendida por Luisma. Y como no hay dos sin tres, Sancho de nuevo realizó una buena acción por la banda derecha, centró aunque el balón se paseó por el área sin que ninguno de sus compañeros llegara al remate.

Todas las acciones encontraron el reconocimiento de una afición ansiosa de ver a los suyos ganar o puntuar, pero el mazazo llegó también pronto. Porque cuando mejor jugaba el Pozoblanco, otro error de Félix Leal dejó solo al capitán del Alcalá, Gonzalo, que batió a Calonge a placer cuando se cumplió el primer cuarto de hora de juego. El susto se incrementó cuando dos tres minutos más tarde Vega se quedó solo ante el portero de los blanquillos que sacó una magistral mano para dejar a los suyos con vida en el partido.

Reacción pozoalbense

Y vaya que si tenía vida el Pozoblanco que consiguió lo que venía persiguiendo desde el primer partido de liga, marcar. Una contra acabó con Charaf entrando por la banda derecha y centrando para que Silva empujara el esférico al fondo de las mallas de la portería del conjunto sevillano. El delantero celebró el tanto con todos sus compañeros y con una afición que cantó el primer tanto de los suyos en esta temporada. Quizás ese gol valió doble porque el componente psicológico en esto del deporte cuanta y mucho.

Los de Mario Rojas no cesaron en su intento de conseguir algo más que el empate y siguieron buscando la portería del Alcalá. Eso sí, no gozó de muchas ocasiones para conseguir marcar por segunda vez, al igual que su rival que tampoco encontró la fórmula para batir a Calonge, aunque se acercó cuando la defensa blanquilla no se mostró con la contundencia suficiente. Se mereció el Pozoblanco, y pudo hacerlo, marcharse a los vestuarios ganando. Silva se quedó solo ante Luisma cuando restaban dos minutos para el asueto pero en el uno contra uno salió victorioso el cancerbero del cuadro sevillano, por lo que la primera parte finalizó con el resultado de 1-1.

Se repite la historia

En el reinicio del choque se vio la diferencia fundamental entre ambos equipos, el que perdona y el que no. Y es que el Alcalá no lo hizo en la primera llegada que tuvo. Fue en un lanzamiento de córner cuando Salvi, casi por casualidad, se encontró con el esférico y acabó consiguiendo el segundo gol de los suyos y el cuarto en su cuenta particular en lo que va de temporada. De nuevo el tanto fue un jarro de agua fría para un Pozoblanco que no demostró la capacidad de reacción mostrada en la primera mitad y que estuvo muy cerca de encajar el tercero instantes después con otro disparo más que peligros de Gonzalo que despejó Calonge.

Le costó al equipo dirigido por Mario Rojas reaccionar pero el fútbol le devolvió algo de la mala suerte que viene teniendo y un despiste de la zaga, esta vez de la sevillana, permitió a los locales volver a empatar la contienda con otro tanto de Silva. Pero le duro poco la suerte porque en el 71 una caída de Rafa en el área propició que el jugador tocara con la mano el esférico y el línea pitó la pena máxima en contra de los locales sin dudarlo. Gonzalo no erró desde la línea de los once metros. A renglón seguido, Vicente Calonge salvó a los suyos hasta en dos ocasiones de encajar el cuarto tanto.

Le tocaba al Pozoblanco remontar por tercera vez en lo que iba de encuentro. Y lo rozó en una jugada que tuvo a Álex Gil como protagonista al enganchar un balón y lanzar una volea que fue sacada de manera incontestable por el portero del Alcalá. Como incontestable fue la sentencia y puntilla del cuadro sevillano en el 82. El Alcalá volvió a aprovechar un despeje en corto, en esta ocasión de Manosalvas, para hacer una buena jugada que acabó con Boris marcando el cuarto y dejando atrás cualquier posibilidad de remontada para los de Mario Rojas.

FICHA TÉCNICA:

2.- C.D. POZOBLANCO: Calonge, Charaf, Fran, Félix Leal (Manosalvas, m. 68), Rafa, Sancho (Miguel, m. 31), Paleta, Valentín, Álex Gil, José Ruiz (Sergio, m. 59) y Silva.

4.- C.D. ALCALÁ: Luisma, Carlos Ávila, Fernando, Pulido, Álex, Gonzalo, Tena, Abraham (Son, m. 84), Vega (Pana, m. 73), Boris y Salvi (Juanman, m. 68).

ÁRBITRO: Mohand Mohand, de Melilla. Amarilla a los locales Paleta, Rafa, Valentín y Silva; y a los visitantes Carlos Ávila y Fernando.

GOLES: 0-1, m. 15: Gonzalo. 1-1, m. 19: Silva. 1-2, m. 51: Salvi. 2-2, m. 64: Silva. 2-3, m. 71: Gonzalo (d.p.). 2-4, m. 82: Boris.

INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la quinta jornada de liga del grupo X de Tercera División en el Municipal de Pozoblanco ante unos 400 espectadores.