Una jornada, eso es lo que ha tardado el técnico del CD Pozoblanco, Alberto Fernández, en señalar el mal estado del terreno de juego del estadio Nuestra Señora de Luna. Sin que sirviera de excusa para perder los dos puntos que el equipo perdió en el descuento, con el empate del Salerm Cosmetic Puente Genil, el técnico quiso ser claro y denunciar el estado del césped. 

Lo hizo después del choque cuando antes de analizar el juego de los suyos y el desarrollo del partido quiso dejar las «cosas claras». «Vamos a hablar bien claro», avisó Fernández para luego indicar que «el estado del terreno de juego es lamentable». El preparador se lamentó de esta situación porque «lo estamos cuidando» sin entrenar apenas en el mismo. Según los datos aportados por Fernández, el equipo ha entrenado durante el verano seis veces a lo que habría que sumar los tres partidos disputados. 

«Nos han dicho que no entrenemos y no lo estamos haciendo, lo hemos pisado nueve veces en todo el verano y da grima», indicó. Así de tajante se mostró Alberto Fernández para señalar el mal estado del terreno de juego, algo que no es nuevo y que ya ocurrió a finales de la temporada pasada. 

En esa ocasión fue el entonces entrenador del equipo, Antonio Jesús Cobos, el que señaló esas deficiencias, un mensaje que fue secundado por algunos jugadores en redes sociales. Unas quejas que llegaron incluso al pleno del Ayuntamiento de Pozoblanco, al tratarse de una instalación municipal, negándose que esas quejas hubieran existido a nivel oficial.