La semana pasada, la concejalía de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Pozoblanco convocó una reunión con diferentes agentes de la localidad para intentar poner en común los recursos que el municipio dispone para acoger a los posibles refugiados que lleguen a Pozoblanco. Siguiendo con las recomendaciones de la Federación Española de Municipios y Provincias, el Consistorio convocó esta reunión para actuar de una manera «coordinada» ya que la idea que proponer la Federación es la de recoger «un único inventario de recursos».

Entre esos recursos, destacan los de alojamiento, manutención, asistencia jurídica, asistencia psicológica, atención social y asesoramiento, acompañamiento a centros escolares, sanitarios y sociales públicos, aprendizaje del idioma y habilidades sociales básicas, asistencia en trámites administrativos, orientación e intermediación para la formación profesional y la inserción laboral y ayudas económicas directas para ayudarles a afrontar sus gastos de primera necesidad. Una vez recogidos estos recursos, la FEMP hará un inventario que posteriormente hará llegar al Ministerio.

En ese sentido, y en una reunión donde hubo representantes de los servicios sociales del Hospital, de la Asociación de Caridad San Vicente de Paúl, Cruz Roja, Cáritas, El Buen Samaritano, Acuide, Adepo y Centro Comercial Abierto, además de la representación política, se fijó como idea primordial poner a disposición de esta causa viviendas vacías, parte fundamental para recibir a familias refugiadas. «El resto de recursos prácticamente los tenemos porque pueden ser cubiertos, pero es importante saber de qué alojamientos disponemos y por eso emplazamos a estudiar este tema para ponerlo en común en una segunda reunión», ha explicado esta misma mañana el concejal del ramo, Modesto Sánchez.

Desde el Ayuntamiento también se viene valorando la posibilidad de asumir el pago de la luz y el agua de aquellas viviendas que sean cedidas para este fin, ya que «se trataría de una partida presupuestaria no muy alta». Sánchez también ha destacado «la buena aceptación» de todas las entidades y asociaciones que se sentaron a estudiar este tema y la «disposición» para que Pozoblanco se convierta en un lugar que acoja a familias en condición de refugiadas.

Por otro lado, el concejal ha explicado que «llamamos a Adepo porque es importante que se consiga la inserción laboral y entre los asociados puede haber interés por el tema del idioma, ya que las personas que vienen tienen un nivel cultural medio y en un momento dado en temas de comercio exterior u otras opciones puede ser importante».