En nuestro querido Valle de Los Pedroches tenemos la suerte de contar, en general, con buenos restaurantes y bares donde suelen servir productos de calidad provenientes de buenas materias primas. Pero, ojo porque en nuestro país no todos son así, hay algunos en los que se aprovechan del cliente.
La Asociación de Consumidores Facua ha publicado en su blog una lista de abusos que suelen darse en más de un local de hostelería. Son #BaresParaNoVolver.
Veamos algunos de estos timos.
-No aparecen las bebidas en la carta. Y no se trata de que tengan una de vinos aparte. Si el precio no aparece, pueden inventarse que una caña de cerveza o un refresco vale 5 euros al traerte la cuenta y entonces ya no hay vuelta atrás.
-Cobran por el pan. Pueden hacerlo, pero sólo si está en la lista de precios. Muchos bares lo hacen, pero por ponerse a pedir, mejor ir a uno en el que este extra vaya incluido, ¿verdad?
-No incluir el IVA en los precios. Algunas cartas marcan un precio al que tienes que sumarle tú mismo el 10%. No indicar el precio final está absolutamente prohibido. Y no vale que en la carta venga escrito «IVA no incluido». A un restaurante se va a comer, no a hacer matemáticas.
-Los precios son más caros en mesa que en barra. Pueden hacerlo, pero sólo si todos los precios vienen desglosados en la carta. Estos bares demuestra un especial nivel de roñosidad porque, ¿qué más da donde te sientes? No es que una zona del bar sea de ricos y otra de pobres…
-Aplicar suplementos por la carne hecha o por el hielo. Sí, en algunos locales sucede. Si pides una hamburguesa o filete muy hecho te pueden cobrar 40 céntimos más por el tiempo extra en el fuego. O si pides un café con hielo te cuesta 30 céntimos más que el caliente. Porque seguramente el agua con la que han hecho los cubitos sea de manantial puro de las altas colinas de California.
-Si pides un vaso de agua del grifo tienes que pagarlo. Hasta este punto llegan en algunos bares.
-Hay una carta paralela cuyos precios sólo están en la mente de los camareros. «Además de lo que está en la carta tenemos…» Hay que entender que hay platos especiales que pueden no estar escritos en la carta, pero algunos pueden aprovecharse de esto y poner el precio que quieran. Hay que tener cuidado.
-No te permiten compartir el menú del día. Que no te engañen, no hay ninguna ley que no permita que puedas compartir la comida con tu pareja, madre, padre, hermano, abuelo o quien tú quieras.
– Cobran por los cubiertos. Es ilegal, porque no puede cobrarse nada que resulte necesario para la prestación del servicio. O sea que si después de comer te traen un ticket en el que aparece: «cubiertos…..1’50 euros» además de cutres te están timando.
Si has vivido alguna experiencia de este tipo seguramente saliste de ese bar o restaurante con la firme decisión de no regresar allí de por vida. Son #BaresParaNoVolver.
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