El colegio Manuel Cano Damián de Pozoblanco presenta un aspecto diferente después de que se haya delimitado la zona donde irá ubicado el comedor escolar para arrancar unas obras que vendrán a dar cabida a una infraestructura muy demandada por la comunidad educativa del centro. La delegada territorial de Educación, Inmaculada Troncoso, ha visitado hoy martes el centro para ver el inicio de las obras de un proyecto que se ha dilatado en el tiempo ya que fue en 2018 cuando el centro recibió la concesión del servicio del comedor escolar. Con un plazo de ejecución de cuatro meses, este servicio estará operativo para el curso escolar 2022/2023, según ha indicado la propia Troncoso. 

Precisamente el retraso del proyecto ha sido una de las cuestiones abordadas durante la visita donde director general de la Agencia Pública Andaluza de Educación, Manuel Cortés, expuso que «éramos plenamente conscientes de que el alumnado no podía utilizar el servicio de comedor a pesar de que se había anunciado hace algún tiempo». «Por desgracia, esta actuación ha sufrido una serie de complicaciones durante su tramitación, que ya se han superado y se ha adjudicado la obra para que se acabe lo antes posible», indicó ante los medios de comunicación. 

En ese tema ahondó la delegada territorial de Educación y Deporte explicando que el hecho de que la adjudicación se haya visto paralizada hasta en dos ocasiones porque las empresas han declinado la concesión ha sido clave para que el proyecto no avanzase a la velocidad deseada. Con todo, Troncoso resaltó que la empresa Construcciones Serrot SA finalmente ha sido la adjudicataria y que ahora tiene por delante cuatro meses para la finalización del proyecto. «Los plazos hay que cogerlos con toda la cautela propia de una obra, pero espero que para el próximo curso escolar el alumnado esté comiendo en este comedor», finalizó. 

Antes de conocer los pormenores de una obra, en la que se aprovechará el actual porche del centro escolar y que finalizará con un comedor con capacidad para 48 personas, el alcalde de la localidad, Santiago Cabello, se sumó a las felicitaciones por la consecución de este proyecto poniendo de relieve la «constante» comunicación mantenida como delegación. 

En lo que se refiere a la obra, la intervención consiste en la construcción de un nuevo edificio que acogerá ambos servicios, comedor y cocina, en una zona ocupada por una estructura de hormigón que es usada actualmente como porche para el alumnado de infantil. No obstante, se realizará una pequeña ampliación de esta superficie para que los espacios cumplan con lo establecido en la normativa para un centro educativo tipo C2, de dos líneas de infantil y primaria, como es el caso. Este nuevo espacio albergará una cocina de 50 metros cuadrados, un comedor de 170 metros, aseos y vestuarios para el personal de cocina y un cuarto de limpieza y basura, sumando entre todas las dependencias un total de 231 metros cuadrados construidos. Las obras se completarán con la edificación de un nuevo porche de infantil con cubierta ligera, que tendrá una superficie similar a la del porche que se ocupa para la construcción del comedor.

Reivindicaciones

El inicio de las obras llega después de demandas por parte de la comunidad educativa para que el colegio Manuel Cano Damián pudiera equipararse con este servicio al resto de colegios públicos de la localidad, que ya cuentan con comedor escolar. Un tema que fue abordado en diferentes sesiones plenarias para contar con el respaldo de los representantes locales, pero que también llegó al AMPA del centro a concentrarse a las puertas del colegio para buscar una solución rápida y eficaz ante un proyecto que se retrasaba en el tiempo. Esa concentración tuvo lugar el pasado mes de septiembre y ahora, dos meses más tarde, las mismas tienen respuesta con el inicio de las obras.