El Centro de Deportes La Granja de Jerez de la Frontera acogerá mañana domingo (17:00 horas) el partido que medirá al Xerez y al CD Pozoblanco, dos equipos que llegan con la necesidad ineludible de seguir sumando puntos para alejarse algo más de la zona más baja de la tabla, la de los dos puestos de descenso. Dos puntos a favor de los gaditanos separan a ambos equipos, dos puntos que podrían neutralizarse en caso de victoria pozoalbense.
El Pozoblanco llega al partido tras una dura derrota ante el Utrera en un partido donde se dejó algo más que los tres puntos con las bajas de Santacruz por sanción y David Reyes por lesión. No obstante, para el técnico de los blanquillos, Javi Moreno, esto de las dinámicas no tiene más importancia ya que «nosotros veníamos de ganar y el Utrera de perder y nos ganaron, los partidos hay que jugarlos y disputarlos, nada más».
En lo que sí coincide Moreno es en la necesidad de ambos equipos por lo que vaticina que «va a ser un partido complicado, tenemos que con las ideas muy claras para intentar conseguir algo positivo». De su rival, el Xerez, lo que más le preocupa al entrenador valenciano son sus delanteros por lo que intentará armar un equipo y una defensa lo suficiente segura para contrarrestar ese punto fuerte de los gaditanos y para «sufrir lo menos posible».
El equipo, que lleva entrenando toda la semana en la Ciudad Deportiva pozoalbense para hacerse al césped artificial, tiene que añadir a las bajas ya mencionadas la de Adriano que se ha comprometido con el Atlético Espeleño de Juan Carlos Quero, aunque aún no tiene la carta de libertad. «Creo que con la edad que tiene debería ser más ambicioso y haber luchado más por el puesto, pero yo he sido jugador y entiendo que quiera más minutos, por lo que le deseo lo mejor», apuntó Moreno.
Así las cosas, Elu es el único jugador que se suma al capítulo de altas y Javi Moreno tendrá que reconfigurar su defensa tras la baja de una de sus piezas claves, Santacruz. Como siempre, el técnico no quiso adelantar nada de ese reemplazo, aunque dejó claro que «no me caso con nadie, la puerta la tienen abierta todos durante toda la semana para que trabajen y a partir de ahí llega lo demás».
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