El Casa Rural Abuela Teo cerró la primera vuelta de la liga con una abultada derrota frente al Nazareno de Dos Hermanas, en el que fue sin duda el peor partido que se le recuerde al equipo en la época del actual entrenador, Juan Carlos Blanco. El efecto de la última victoria no duró nada y la clave la derrota pudo estar en la falta de intensidad de los primeros minutos.

Nada más empezar el encuentro, en el primer minuto el equipo pozoalbense encajó el primero gol tras una falta lateral botada por Luis Hurtado que encontró a Nando, que le ganó la posición a Pablo Torrico para conseguir el 1-0. Tres minutos más tarde, una contra del cuadro sevillano acabó con el 2-0 y un tiempo muerto solicitado por Juan Carlos Blanco, que apostó por las rotaciones y diferentes esquemas defensivos.

Nada más terminar ese pequeño asueto llegó el 3-0, tras una pérdida de balón, que aprovechó Pedro para superar de nuevo a Juan Ángel. De ahí hasta el 4-0 hubo unos diez minutos donde los de Pozoblanco pudieron recortar distancias pero el mazazo llegó a cinco del descanso tras un error en defensa de Caro que dejó a Nando solo para batir de nuevo al cancerbero visitante.

Siguen los goles en contra

No cambió nada tras el paso por vestuarios porque en el minuto 21, Julio aprovechó un pase largo ganándole la espalda a la defensa pozoalbense para poner la manita en el marcador. Los visitantes no reaccionaron, no encontraron ni su juego, ni su sitio y estuvieron a merced del filial bético que no tuvo piedad y de nuevo a la contra consiguió el 6-0, algo que se repetiría en las botas de Hurtado con el 7-0. Las contras y las pérdidas de balón fueron determinantes y en el 27 una pérdida de Manolín fue aprovechada por Pedro para poner el 8-0. Por cierto, que el que fuera capitán pozoalbense fue expulsado, según recoge el acta, por agredir a un partido por lo que le podrían caer entre dos y cuatro partidos.

Sin muchas posibilidades de conseguir algo positivo, los visitantes acortaron distancias en el minuto 33 tras una falta que botó Urko dándole a Tete y posteriormente tocó el portero sevillano sin que finalmente pudiera despejar. El 9-1 llegó en el mismo minuto con un tanto de Borrego a pase de Cristian y poco después, en una de las pocas jugadas trenzadas de los pozoalbense, Urko anotó el 9-2. El 10-2 definitivo lo puso Julio a uno del final cerrando la goleada del equipo de Dos Hermanas