El calendario escolar marca hoy la vuelta a la rutina en Andalucía, las aulas de miles de colegios volverán a tener vida desde que cerraron sus puertas en el mes de junio. Un nuevo curso escolar que llega con algunas novedades trazadas desde la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía y que pasan por recuperar las clases de 1 hora en lugar de las de 45 minutos, así como un aumento en asignaturas como la Educación Física. Los niños y niñas de la comarca de Los Pedroches se engloban también entre quienes hoy martes arrancan un nuevo curso, que además de las novedades, llega con retos que vienen a repetirse curso tras curso.
Uno de los centros que vuelve a abrir sus puertas este año es el Manuel Cano Damián, que se libra de la reducción de unidades y líneas que ha sacudido a numerosos centros de la comarca, aunque lo hace sin el prometido comedor escolar, que al menos, no estará para el inicio de este curso. Su directora, Emi Díaz, recibe a hoyaldia.com el último día de preparativos, mientras el profesorado ultima los detalles de sus programaciones, adorna sus clases y se prepara para afrontar un nuevo curso escolar. Con ella hablamos de educación, de retos y de motivación.
Pregunta: El curso llega con algunos cambios, ¿los valoran de manera positiva?
Respuesta: En principio nos ha pillado de sorpresa, la organización es diferente. Han cambiado los tramos horarios, la duración, pero no es que sean 45 minutos o una hora, es que antes teníamos seis sesiones de 45 minutos y ahora tenemos tres sesiones de una hora y dos. de 45 minutos, te daban la opción de tener dos tramos de 30 minutos, pero no lo hemos visto conveniente. Es una dificultad grande porque somos 26 personas en el claustro y la organización es compleja.
P: Además los cambios llegan con el curso prácticamente cerrado.
R: Las instrucciones salieron el 27 de junio. El aumento de Educación Física es grande y al tener una segunda profesora la distribución horaria ha sido compleja. Decidimos también que hubiera una persona más para impartir inglés porque ya hace años que lo incluimos en infantil y queremos que el alumnado esté lo mejor preparado posible.
P: Se habla mucho del aumento de las horas de Educación Física, ¿cómo valora este cambio?
R: Los niños tienen que utilizar la Educación Física para aprender, una Educación Física para que no sólo se desfoguen, sino para aprender me parece estupenda. Ahora bien, la subida en Lengua y Matemáticas no la vemos como tal porque ha habido que hacer reajustes, los tramos horarios no cuadran porque no salen las cuentas. Imagina, 3 horas de Inglés, 3 de Educación Física, 5 de Matemáticas, 5 de Lengua para un Primero son 16 horas y tenemos 15 a lo largo de la semana, por algún lado tienes que perder.
P: ¿Cómo afronta el centro este nuevo curso?
R: Encantados, siempre. Llevo ya treinta cursos y sigo nerviosa, muchos profesores me decían que estaban nerviosos y a mí me gusta porque eso conlleva ilusión. Es cierto que estos cambios nos han alterado un poco porque han sido precipitados, pero trabajamos con mucha ilusión, siempre. Nos vamos haciendo a los cambios, es algo que nos pasa todos los años, tenemos nuevos recursos, gente nueva que acaba de aprobar oposiciones y a las que le falta la experiencia que nosotros tenemos, nos beneficiamos mutuamente, nosotros porque ellos llegan muy preparados y ellos porque aprenden de nuestra experiencia.
P: ¿Qué retos afronta el profesorado?
R: Cuando empezamos el curso lo primero que queremos es que los resultados sean buenos, pero lo principal es que encontremos a los niños motivados a la hora de aprender. Es cierto que las nuevas tecnologías favorecen que el alumnado participe de su propio aprendizaje. ¿Dificultades? Las clases siguen siendo muy numerosas y también es cierto que cierto material se nos queda ya obsoleto. La principal dificultad reside en que los niños y niñas quieran aprender y eso es parte del maestro y del entorno familiar. Tenemos que hacer las clases divertidas sin que se conviertan en una fiesta, la disciplina es importante, pero el niño tiene que aprender jugando. Mis alumnos aprenden a hacer el cubo de Rubik, porque es una manera también de ejercitar la mente. Pero sí es cierto que la disciplina es importante, respetar los momentos.
Un proyecto que tenemos en el centro y que funciona muy bien es el de ‘Patio dinámico’ donde se trabaja que no haya ningún niño solo, sin jugar. Luego están la figura de los mediadores para solucionar los conflictos, que afortunadamente no tenemos muchos, pero es algo que funciona porque los niños saben analizar los problemas y es un recuso que tenemos y utilizamos.
P: Me hablaba de nuevas tecnologías y aquí se incluye, por ejemplo, herramientas como WhatsApp. ¿Qué opina respecto a esto, por ejemplo, a los grupos de padres?
R: El buen uso de todas las tecnologías es estupendo, creo que las novedades nos facilitan el trabajo, la organización y la motivación del alumnado. Son muy positivas siempre y cuando hagamos un buen uso. Los padres a veces nos encontramos con la dificultad que le dejamos el ordenador para trabajar y no sabemos el uso que le dan los niños, nosotros quizás tampoco demos el mejor ejemplo. Los grupos de WhatsApp crean dificultades, tendríamos que intentar que los niños tuvieran su propio grupo, que ocurre ya en algunos niveles, en el que siempre debe de estar un adulto porque los niños hacen un uso indebido porque sabemos los problemas que hay hoy en día y debemos prevenirlos. Hay que saber actuar ante ellos, pero creo que el remedio está en la prevención, aunque haya que saber cómo actuar en caso de acoso o maltrato. Y en la prevención debemos de estar todos los adultos. Incido en el tema del ejemplo, si los padres comentan por algún grupo alguna cuestión de un profesor eso acaba llegando a oídos de los niños y perdemos autoridad. No es que hayamos detectado muchos problemas, pero sí hablamos y aconsejamos a los padres, por ejemplo, a que no digan los deberes por los grupos porque eso genera una pérdida de atención y si el niño no se ha enterado pues se debe permitir que tenga un castigo para que vaya adquiriendo responsabilidad.
Es importante también escuchar a los niños, sabemos que tenemos poco tiempo, pero dame calidad de tiempo y no cantidad, es realmente importante. Al igual que ser cómplices del tutor, todo lo que tengan que aclarar los padres es mejor que lo hablen con el tutor, porque los niños cuentan la versión que les interesa y el profesorado estamos aquí para atenderlos y que no se cree malestar. Somos una comunidad educativa muy implicada.
P: Otra de las cuestiones que se habla mucho es de los deberes. ¿Les preocupa que les cuestionen sus decisiones hasta el punto de volver a esa pérdida de autoridad de la que hablábamos antes?
R: Para mí lo más importante es tenerlo claro con los padres, pero creo que estamos todos en la misma línea. Los deberes no existen como tal, durante la mañana se proponen una serie de ejercicios, la mente hay que ejercitarla, los ejercicios son una preparación previa. Ocurre que se mandan una serie de ejercicios para hacer en el tramo horario de la mañana y hay niños que no terminan y tienen que hacerlo en casa, es la tarea que no han terminado por la mañana. ¿Qué se trabaja? Que intenten acabar todo en clase. Eso no quita que nos guste que lleven alguna tarea para reforzar sobre lo aprendido porque es necesario que los niños aprendan que tienen que dedicarle un rato por la tarde al estudio, cada día hay que repasar lo aprendido por la mañana. Es la forma de adquirir un hábito de estudio y trabajo que van a necesitar en cursos posteriores. Digo lo mismo de antes, la calidad de ese rato es fundamental, más que la cantidad. Es complejo cuando tienen muchas actividades extra escolares y no se programa este rato de estudio como una parte más de la planificación de esa tarde.
P: Me decía antes que lleva a sus espaldas treinta cursos, ¿cómo ha cambiado la educación en este tiempo?
R: Ha cambiado muchísimo, yo creo que positivamente. Ha evolucionado como todo, la sociedad va muy deprisa. Las nuevas tecnologías han provocado que volemos, los cambios llegan antes de estar preparados para ellos y debería ser al contrario. Es cierto que nosotros estamos aprendiendo constantemente, haciendo cursos, innovando, pero sería importante estar preparados antes de los cambios. Este año, por ejemplo, en matemáticas en tercer ciclo se va a impartir también robótica, pues ya estoy solicitando un curso, pero claro vamos con el paso cambiado porque nos gustaría prepararnos de manera previa.
¿Los padres? Pues antes apenas iban al colegio, ahora mismo la participación es muy alta y se agradece, pero también siento que hemos perdido un poco de autoridad y eso repercute negativamente en el alumnado, en la disciplina de los niños. Yo no soy autoritaria, pero sí me gusta la disciplina. El aprendizaje para que sea efectivo tiene que contar con la motivación, pero también con la disciplina y esa autoridad que hemos perdido es necesaria para que sepan escuchar. El profesor puede ser cordial, afable, simpático, sensible, empático, pero es el profesor y no se le puede perder el respeto nunca.
P: Este curso Manuel Cano iba a tener comedor escolar entre su cartera de servicios. Empieza el curso y no hay noticias del comedor.
R: El 25 de febrero salió la resolución de que como servicio complementario para el nuevo curso estaría el comedor, un servicio que se nos concedió porque estábamos en desventaja con los otros dos centros públicos de la localidad y ahora con la baja natalidad eso te crea una desventaja, tenemos que tener todos las mismas cartas para jugar. Lo que sí es cierto es que desde la delegación se me informó que requería un procedimiento, primero se tenía que valorar la ubicación del comedor, hacer un proyecto, estudiarlo para su aprobación y luego se licitaban las obras. Es decir, que llevaba unos trámites. Me informaron que en septiembre no estará hecho y no me dieron fecha de apertura. No obstante, en junio se piden los servicios complementarios y venía el comedor y nosotros tenemos que recoger las solicitudes e informar a los padres y madres de la situación. Pero a día de hoy no podemos saber la fecha.
Hemos recogido las solicitudes de comedor que son 80 cuando la concesión es para 70 plazas. Es lo que puedo decir, me imagino que tiene que haber una dotación presupuestaria para el proyecto. Es la información que nos dieron y la que yo estoy transmitiendo.
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