El Balonmano Pozoblanco se clasificó ayer para la final de la XVIII edición de la Copa de Andalucía, tras derrotar contra todo pronóstico al Meridiano Antequera por 28-25. Los vallesanos tratarán de sorprender al Ángel Ximenez de Puente Genil el próximo fin de semana y llevar el trofeo a sus vitrinas.

Los de Miguel Ángel Moriana, a los que no valía el empate por la mayor diferencia con la que los malagueños habían ganado al otro equipo participante en esta fase previa, el ARS Palma del Río (29-22 el Meridiano, 28-29 el Pozoblanco), salieron decididos a hacer valer el factor cancha. Sin embargo, su rival manejó ventajas de dos y tres goles en la primera parte, pese a lo cual los goles de Portero y Requena permitían mantener la igualdad al descanso (14-14).

En la segunda mitad, el cuadro visitante, que ha hecho un equipo para pelear por el play-off a División de Honor esta campaña, volvió a disfrutar de ventajas de hasta dos goles (18-20), pero un parcial 4-0 de los pozoalbenses, que transformó el 21-21 del electrónico en un 25-21, decantó la balanza del lado local.

El trabajo excelente en defensa de los de Moriana, comandado por Paco Bustos, y los diez tantos de Julián Portero en ataque, bien secundado por Ángel Povedano, permitieron rematar una gran victoria, tercera en pretemporada de los blanquillos. Ahora, sin nada que perder, buscarán un título que no conquistan desde hace trece años, cuando se hicieron con él en propiedad al ganarlo tres veces consecutivas.