En su mejor momento de la temporada en cuanto a resultados pero en uno muy delicado en cuanto a la enfermería afronta el Balonmano Pozoblanco su encuentro de mañana (Pabellón Juan Sepúlveda, 18:00 horas) ante el Handbol Bordils. Los vallesanos se miden a un rival directo que les antecede justo en la tabla con un punto más -duodécimos los vallesanos con 17, undécimos los catalanes con 18- y lo hacen con la novedad del fichaje de Nacho Serrano, concretado en las últimas horas.
El entrenador vallesano, Miguel Ángel Moriana habló de la incorporación del jugador, que podrá debutar mañana si todos los trámites con la Federación para la ficha se resuelven satisfactoriamente. «Nacho nos podrá aportar su experiencia y calidad. Es un jugador que ha estado en la Liga Asobal y seguro que podremos aprender mucho de él, además de que nos aportará muchas variantes a nuestro juego».
Dicotomía entre los momentos
Este fichaje alivia un poco una situación que se estaba volviendo preocupante. «El equipo está bien a nivel de juego, pero estamos atravesando un momento muy delicado por las bajas, que están haciendo daño a la plantilla. Cada partido que pasa somos menos», comentó. De hecho, el entrenador está pendiente de la evolución de otro jugador, Julián Portero, que tiene faringitis.
Todo ello antes de un encuentro «importantísimo» ante un equipo que fue revelación durante muchas jornadas pero que ahora está entrando en la que puede ser su posición más natural. «Bordils es un rival directo y ante él tenemos la opción de salirnos un poco de esa zona de abajo. Tenemos que ganar este partido sí o sí, porque así tendrá mucho más valor la victoria de la semana pasada».
El Handbol Bordils llega a Pozoblanco con un balance de 8 victorias, 2 empates y 9 derrotas. Su fortaleza está sobre todo en casa, como viene de demostrar una vez más la pasada semana al empatar ante el líder (35-35). Fuera de casa cayó contra Octavio (32-24), Barcelona B (39-29), ARS (39-37), Benidorm (33-31), Zarauz (19-18) y Torrelavega (31-27), aunque ganó en Zamora (28-33) y Ereintza (30-31) y empató contra Chapela (25-25).
Moriana considera, al preguntarle sobre las claves del encuentro, que «lo importante es seguir manteniendo el juego de las últimas semanas y seguir realizando buenos trabajos defensivos que nos permitan ir llevando el tiempo de partido a nosotros y no al rival».
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