El Balonmano Pozoblanco afronta mañana un complicado por el largo desplazamiento pero vital enfrentamiento contra el Amenabar ZKE en la localidad vasca de Zarautz (Pabellón Municipal, 19:30 horas). Los vallesanos, reforzados por la victoria contra el Teucro de la pasada jornada, buscan implicar a más equipos en la pelea por evitar el play-off de descenso y su rival de mañana puede ser un buen candidato. Está a cuatro puntos y parece una entidad de nivel similar a los de Moriana.

El entrenador del equipo vallesano, que cumplirá su segundo partido de sanción en la grada, destaca que el equipo viaja «con mucho ánimo después del partido pasado y con ganas de ir a Zarautz para ganar el primer partido fuera de la temporada y además contra un rival directo».

Hay en el ambiente en los entrenamientos cierto sentimiento de revancha deportiva con los guipuzcoanos, que se llevaron dos puntos del Juan Sepúlveda en la ida (26-27) que no estaban en los pronósticos. Vencer mañana supondría pues igualar el average y, a poco que no sea por la mínima, recuperarlo.

Aunque el hándicap del cansancio acumulado por el viaje estará como siempre ahí, al menos Moriana tiene la ventaja de no tener bajas. La única es la de larga duración de Antonio Carreño, que precisamente ya se ha trasladado a Alicante para operarse en breve de sus problemas en el hombro que le tienen a mal traer desde el comienzo de la temporada.

Defensa dura y jugadores desequilibrantes, bazas del rival

El técnico aseveró al preguntarle sobre Zarautz que «es un equipo muy difícil en su campo, con una defensa muy dura y jugadores desequilibrantes como Valenciaga O Aguirrezabalaga». Por ello, la clave del encuentro será «que mantengamos la intensidad defensiva y tengamos las ideas claras en ataque».

Como es natural entre los equipos de abajo y vascos en general, el Amenabar basa su fortaleza en su campo. De las ocho victorias que atesora, cinco las ha logrado en su campo, donde sólo ha ganado el Barcelona B (24-32) y ha sumado el Barakaldo (24-24). Además de los de abajo, Ereintza o ARS, han mordido el polvo conjuntos como Zamora (33-30), Benidorm (24-23) o Bordils (19-18). Duro reto para los de Moriana.