Vive un buen momento de forma y juego y eso se está reflejando en los resultados de un Casa Rural Abuela Teo que el sábado se impuso al Villalba por 8-1 en un partido donde la igualdad fue la tónica predominante en la primera parte para dejar paso a un segundo acto donde llegó el recital de goles pozoalbenses. Importantísima victoria ante un equipo que lleva años ocupando la parte alta de la tabla y que les sirve a los de Juan Carlos Blanco para acumular su tercer triunfo consecutivo y ascender a la quinta plaza de la clasificación.

Fue un partido muy completo por parte del equipo pozoalbense en una primera parte que se dirimió entre dos conjuntos con patrón muy similar de juego donde predominaron los esquemas defensivos sobre los ataques y las pocas llegadas las solventaron los dos cancerberos. El cuadro visitante presionó muy arriba la salida de balón y los pozoalbenses tuvieron serias dificultades para llegar a portería por lo que todo hacía presagiar que si llegaba a algún gol será a balón parado y así fue.

En el último minuto de la primera parte llegó el 1-0 tras un saque de banda de Manolín que buscó el remate en el área de Caro pero que se encontró con un defensa visitante que marcó en propia meta un gol que sería decisivo por el minuto en el que llegó, uno de esos goles llamados psicológicos. Nada más comenzar el segundo acto, una jugada de Rafa dueñas por banda derecha acabó con un disparo despejado por el portero y cuyo rechace aprovechó el mismo Dueñas para a la media vuelta hacer el 2-0.

La reacción del equipo visitante no se hizo esperar y Juanma acortó distancias en el minuto diez de la segunda parte con un magnífico tanto a la media vuelta desde la frontal del área. No se puso nervioso el cuadro pozoalbense que siguió aplicando su juego y Santos en el 13, aprovechando un rechace de la defensa, y Rafa Dueñas con una vaselina ampliaron la ventaja de los locales. Con el 4-1 en el electrónico, el entrenador de los onubenses pidió un tiempo muerto tras el que optó por jugar con portero-jugador pero la decisión no le salió bien y el Pozoblanco supo aprovecharse de ese error.

El primero en aprovechar esa circunstancia fue Caro que presionó lo suficiente para que meter la puntera fuera suficiente para marcar a puerta vacía. Un minuto después, sería Santos el que hiciera el 6-1 con un gol desde su propia área al recoger un rechace y de nuevo a puerta vacía marcar. A dos minutos del final Manolín robó la cartera a Juanma para seguir ampliando la cuenta anotadora de los locales y Cajas cerró el marcador con el 8-1 a pase de Caro.