El CD Pozoblanco afronta su semana de descanso dentro del Grupo 10 de Tercera División por la retirada del Ayamonte. Un asueto que le traerá consigo tres puntos más en una victoria por 2-0 como decretó la Federación Andaluza de Fútbol y que le podrían acercar más a su reto de no caer a Primera Andaluza. Aunque esa batalla tiene muchos episodios aún por contar.
Y, por desgracia, no sólo los relativos a los encuentros propios de los hombres de Mario Rojas, ni siquiera a los que jueguen La Palma y Xerez, que juegan entre ellos esta jornada, o algún otro equipo aún implicado en la pomada de abajo. El Pozoblanco juega también en el Grupo IV de Segunda B, porque una situación como la actual, con cuatro equipos en descenso que irían al Grupo 10 de Tercera (San Fernando, Sevilla Atlético, Sanluqueño y Écija) haría descender automáticamente a otros dos conjuntos de Tercera a Andaluza.
La reglamentación de la RFEF permite que un grupo de Tercera pueda estar formado por situaciones así por hasta 22 equipos, pero no más, por lo que, en caso de que esa clasificación de Segunda B se mantuviera, nunca habría una situación de partida antes de empezar a jugarse el play-off de ascenso de Tercera a Segunda B con 24 posibles equipos. Es decir, por irnos a la clasificación actual, si San Fernando, Sevilla Atlético, Sanluqueño y Écija descienden bajarían a Andaluza, además del retirado Ayamonte, el Xerez, decimonoveno, el Pozoblanco, decimoctavo, el Sevilla C, que es decimoquinto pero no podría coincidir con el primer filial, y La Palma, decimoséptimo. Si el Sevilla Atlético se salvara y cayera, Dios no lo quiera, el Córdoba B, podría bajar el decimosexto, el Arcos.
La consulta con fuentes federativas revela que el descenso sería automático, aunque estos equipos serían repescados en cuanto hubiera vacantes. La fórmula más clara es que hubiera ascensos desde Tercera de equipos como San Roque de Lepe, Betis B, Alcalá o Ceuta, pero queda la duda de si la Federación preferiría dejar el Grupo 10 en 20 equipos y que fueran supernumerarios los grupos de Andaluza o de Preferente, con más opciones de ligas más largas que en Tercera, para el que un calendario de 42 jornadas es un engorro.
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Así que el Pozoblanco debe rezar para que como mucho haya dos descensos desde el Grupo IV de Segunda B al Grupo 10 de Tercera, algo que no parece fácil porque el Arroyo extremeño, con mala pinta, ha reaccionado muy bien, y tanto La Roda como Almería B están dejando mejores sensaciones que otros de los equipos mencionados. Un consuelo es que fueran tres pero uno de ellos el Sevilla Atlético, con lo cual en ese caso el primer descendido extra sería el Sevilla C.
Es curiosa toda esta situación, porque la última vez que el Pozoblanco descendió de Tercera, entonces a Preferente, también fue por arrastre tras lo sucedido en la categoría de bronce.
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