A dos jornadas para el final de la liga, el equipo juvenil de Fútbol Sala de Pozoblanco se ha alzado con el campeonato liguero. Lo hizo sin jugar, tras la derrota del Sipnasis de Luque, su más inmediato perseguidor. El entrenador del equipo, Francisco Pozuelo, no duda en afirmar que “cuando me lo comunicaron sentí un gran alivio, nos quitaron un gran peso de encima”. Los juveniles han demostrado su compromiso con el equipo y con este deporte durante toda la temporada y la recompensa ha llegado. Hoyaldia.com ha querido estar con uno de los artífices de este campeonato liguero, el técnico del equipo, para que nos contara los pormenores de este triunfo.

Pregunta: En su primer año como entrenador, imagino que el balance no puede ser más positivo tras la consecución del título de liga.

Respuesta: La verdad es que ha ido muy bien porque era una experiencia nueva. Arrancamos con algunas incógnitas porque me quedaba con siete jugadores nuevos y siete veteranos y no sabía cómo iba a funcionar el equipo teniendo la referencia del año pasado y de estar trabajando con el compañero que ahora entrena al primer equipo, Bartolomé Calero “Momé” y la verdad es que no sabía como iban a estar los jugadores.

P: Por lo que me cuenta, entiendo que cuando se le ofreció la oportunidad de llevar al equipo no se planteó ser campeón de liga.

R: Para nada. El objetivo al inicio de la temporada era hacer un grupo bien formado porque había mucha gente nueva, hacer una familia como siempre hemos hecho en el primer equipo y que se note dentro y fuera de la pista. Vimos que era posible, a los dos meses ya nos dimos cuenta que el equipo estaba acoplado y ya nos pusimos otra meta que fue la de quedarnos entre los cinco primeros clasificados.

P: El equipo ha conseguido catorce victorias, un empate y dos derrotas. Cuénteme las claves de esos números.

R: La clave de la temporada ha estado en que los jugadores veteranos han ayudado a los más jóvenes para que se acoplaran al equipo. Si el entrenador se pone con la gente nueva de hora primera a enseñar la táctica corres el riesgo de que los veteranos se cansen y no vengan. Tenemos dieciséis muchachos y la verdad es que no faltan a entrenar, ha sido una alegría, la gente no ha faltado nunca y ha dado siempre la cara.

P: El resultado final invita a pensar a que todo ha ido sobre ruedas, ¿pero no se ha encontrado con algún problema en estos meses?

R: La verdad es que no. Tienes las incógnitas de siempre, si un jugador se va a molestar porque juega menos que otro, pero han sido los propios jugadores los que se han dado cuenta que los veteranos tienen más experiencia y han visto el camino a seguir sabiendo que el año que viene son ellos los que tienen que dar la cara.

P: Hablando de la consecución del título, ¿da igual como proclamarse campeón o le hubiera gustado no descansar en esa jornada y ser campeón jugando?

R: La verdad es que me da igual. Veníamos de estar quince días sin jugar. El sábado estuvimos echando un rato con equipo de la liga local de fútbol sala para preparar el partido de esta semana frente el Adecor, equipo que va tercero en la liga y que es el que más me ha gustado en la primera vuelta. Aunque le ganamos 3-1 hacen un juego muy bonito y la verdad es que nos han quitado un peso de encima. Cuando me llamaron para decírmelo me entró una flojera que me quedé descansando.

P: Ese partido del que me habla, ¿cómo se lo plantea el equipo?

R: Vamos a ir a dar la cara, a demostrar lo que somos que para algo somos los campeones y jugar que es lo que más nos gusta.

P: Este campeonato viene a refrendar y respaldar el crecimiento del fútbol sala en Pozoblanco, ¿no cree?

R: Se está haciendo mucha afición. Cuando me dijeron que si quería ser el entrenador me lo pensé pero cuando vi que tenía veinticinco muchachos lo tuve claro porque eso quiere decir que está gustando y que hay compromiso.

P: ¿Quiere decir eso que también se están haciendo bien las cosas desde el club?

R: Si. Hay una Junta Directiva que está peleando mucho a pesar de las crisis que hay y eso se nota. Es el equipo que “más quiere” la federación porque tenemos todos los pagos al día y eso es también muy importante.

P: Volviendo a su equipo, ¿podría decir algún nombre propio que haya sobresalido durante la temporada?

R: Hay muchos. Cada jugador tiene su función. El equipo es como si fuese una empresa, desde el capitán hasta el último jugador todos saben la misión que tienen. No ponen peros. Los padres están muy contentos también porque es una forma de educar en otros valores y mientras los más jóvenes están aquí no están en otro lado.

P: Me imagino que ese debe ser uno de los objetivos de toda categoría base

R: Si, por lo menos aquí el fundamento es ese. No esperaba que los jugadores respondieran como lo están haciendo. Están aquí tres días a la semana, luego los domingos cuando hemos jugados se han cuidado el día anterior y eso con las edades que tienen es complicado y es muy bueno que lo hagan.

P: Y ahora, ¿a disfrutar o a pensar ya en la temporada que viene?

R: Hemos empezado los últimos entrenamientos a meter gente que va a jugar el año que viene para que se vayan acostumbrando a las tácticas. Eso es un indicador de que la gente quiere jugar. Nos queremos preparar para la Copa Diputación que se juega en mayo y que el club está hablando con la Federación para que se dispute en Pozoblanco y vamos a jugar la liga de las empresas para no perder el ritmo. Luego tendremos un par de meses de descanso y a mediados de agosto vuelta al trabajo.