La VII edición de la Marcha Cicloturista Nacional a Sierra Morena, Memorial Pedro Plazuelo que organiza la Peña Ciclista San Bartolomé de Pozoblanco se saldó con un éxito de participación, que si bien es cierto que bajó con respecto a ediciones anteriores, consiguió al final alcanzar las 150 inscripciones previstas. Un éxito que también se extiende a la organización que supo llevar una carrera intensa de principio a fin, que transcurrió con un ritmo muy alto y que finalmente se apuntó Fran Medina, que se impuso por segunda vez en esta carrera.

Después de la salida neutralizada -durante los diez primeros kilómetros- comenzaron a establecerse los primeros grupos y aparecer los primeros cortes. Aunque en un grupo más numeroso, en cabeza estuvieron dos ciclistas locales, el propio vencedor de la prueba y Manuel Ballesteros. Cuando ambos llegaron a Villanueva de Córdoba, Medina necesitó asistencia técnica tras tener problemas en la rueda trasera de su bicicleta, siendo esperado por Ballesteros -creando un tándem perfecto- para posteriormente unirse de nuevo al grupo de cabeza sin problema.

Antes de la bajada del puerto del Caballón, Ballesteros intentó romper la carrera para evitar una bajada en grupo que vendría a ser más peligrosa, un ritmo que siguieron siete u ocho corredores hasta Obejo. En ese punto fue otro de los ciclistas participantes el que volvió a subir la intensidad de carrera consiguiendo hacer una fractura en ese grupo de cabeza, que sin embargo se unificó de nuevo antes de llegar a Villaharta.

Ese fue el momento que eligió el ganador absoluto de la prueba, que llegaba mermado de fuerzas, para volver a darle un plus a la carrera y marcharse en solitario para proclamarse vencedor de la séptima edición de esta Marcha Cicloturista con un tiempo de 3:15:34. Por detrás de él, llegaron José Antonio Merino y Jesús Merino que entraron juntos en meta con dos minutos más sobre el tiempo de Medina. El siguiente pozoalbense fue Manuel Ballesteros que empleó un crono de 3:19:13 para completar los 120 kilómetros de la prueba.

Fran Medina mermado pero letal

Tras la conclusión de la carrera, el interés se centró en el ganador de la misma. Fran Medina relató una prueba a la que llegaba «mermado» y en la que su participación estuvo dudosa hasta el último minuto porque «la verdad es que los cambios de temperatura están provocando que el resfriado no se cure del todo y llevo toda la semana sin entrenar prácticamente. No tenía pensando correr pero al final me decidí porque me apetecía correr aquí, en mi pueblo», relató el joven ciclista.

Medina detalló como «al pasar Villanueva me saltaban los piñones y Manolo se paró conmigo, algo de agradecer, luego volvimos pronto a cabeza algo importante porque con el ritmo de cabeza si te quedas rezagado es complicado volver a las primeras posiciones». En cuanto a la ruptura de la prueba, el ciclista comentó que «antes de bajar el Caballón se hizo una pequeña selección y ya en la subida de Obejo se seleccionó muchísimo. Yo decidí irme un poco después de Villaharta para hacer la bajada solo y los dos últimos puertos». «No era mi intención entrar en meta solo, si quería subir la Chimorra porque daban un premio, pero la ventaja que tuve fue suficiente aunque nunca estuve tranquilo porque el aire pegaba de cara y eso hace que dos o tres caminen mejor que uno solo».

El ciclista reconoció la «buena organización» de la prueba y determinó que «esta prueba está adquiriendo un gran nivel» y avanzó que ahora su objetivo se centra en «prepararme bien y coger el punto que con el descanso se ha ido» para afrontar el Campeonato de España que se disputa en tres semanas.