Se necesitaba una victoria y se consiguió. El Club Deportivo Pozoblanco logró en la novena jornada de liga su primer triunfo liguero y afronta el domingo (17:00 horas) una nueva salida, en esta ocasión, para medirse a un C.D. Gerena al que si gana conseguirá recortarle distancias y mirarlo a tan solo tres puntos de distancia. Los tres puntos cosechados ante el Mairena han reforzado a un equipo que lo necesitaba y que ahora viaja con otras perspectivas y, sobre todo, con unos jugadores que han recuperado la moral tras darse cuenta de que son capaces de cosechar resultados positivos.

La tarea vuelve a no ser fácil y los pupilos de Mario Rojas se medirán a un club que ha conseguido cuatro ascensos desde su fundación en el año 2006 y que cimientan su éxito en mantener la base de su equipo, un mismo entrenador y una plantilla que sufre pequeñas modificaciones año tras años. «Son muchos aspectos los que tenemos que tener en cuenta, pero la victoria ante el Mairena nos ha dado mucha moral y vamos a intentar sacar algo positivo y aprovecharnos de su racha, ya que llevan cuatro partidos empatados con una victoria intercalada y se lo podemos poner complicado», explicó el entrenador del Pozoblanco.

El mal inicio de los suyos viene provocando que la calculadora salga a relucir muy a menudo y el técnico de los blanquillos no pasó por alto que «si ganamos nos ponemos con seis puntos y ellos tienen diez», una situación que provocó que Rojas calificará el choque como «un partido clave similar al del día del Sevilla C y aunque podamos perder, no hacerlo con un resultado abultado para luego en casa poder revertir la situación».

Respecto a su rival, el entrenador del Pozoblanco indicó que «tenemos que tener muy cuidado para que no nos desborden por las bandas con un extremo que tienen muy bueno, además de su medio centro y su delantero, Edu, que ya suma cuatro goles. Quizás no sea un equipo con muchos jugadores de renombres pero sí un bloque solido y  con futbolistas con mucho oficio».

Bajas y reajustes

Como le viene sucediendo durante toda la temporada, el preparador de los blanquillos tendrá que volver a encajar las piezas y realizar reajustes por las bajas que atesora y es que, como reconoce, «la victoria la hemos pagado muy cara». Y es que el partido ante el Mairena acabó con Fran y Molero expulsados por lo que ambos se perderán el partido ante el Gerena, además el último en incorporarse a la disciplina pozoalbense ha sido sancionado con dos partidos.

A esas bajas habrá que sumar las Álex Gil, Juanjo y Trujillo y Charaf y David Carmona volverán a ser duda hasta última hora. Rojas, que verá el partido desde la grada, tiene el esquema que planteará dibujado y apuntó que «creo que vamos a jugar, a probar con tres centrales y dos hombres de banda para poder tener una cobertura en el lateral y también recorrido en ataque, vamos a trabajar para salir a presionar arriba porque si podemos robar algún balón va a ser cerca de su área».

Las dudas vienen en la parte de arriba, ya que Mario Rojas baraja la opción de jugar con un delantero y un mediapunta o con dos delanteros. «Tenemos que poner las piezas y, sobre todo, conseguir que el equipo salga bien posicionado y centrado porque es muy importante hacer algo positivo fuera de casa porque nos han ganado fácilmente casi todos los equipos y es una de las cosas que más tenemos que trabajar», apuntó un Rojas que tiró de las estadísticas para alertar a los suyos y reflejar que «entre el minuto 45 y 60 estamos encajando muchos goles y tenemos que revertir esta situación y conseguir llegar al descanse con el empate a 0 o con un gol a favor». Para ello, tirará de la experiencia de los suyos, especialmente de Alberto Fernández, porque «tenemos que conseguir que el equipo sea capaz de remontar también fuera de casa y no venirnos abajo tan fácilmente».