El escritor Francisco Onieva ha conseguido que dos de sus títulos sean parte de los finalistas del XXIII Premio Andalucía de la Crítica, nombre que dio a conocer ayer la Asociación Andaluza de Escritores y Críticos Literarios y que han sido seleccionados por más de un centenar de críticos de entre las obras publicadas por autores andaluces durante 2016. El poemario Vértices y El extraño escritor y otras devastaciones en categoría de cuento son las dos obras con las que Onieva podría ganar ambos premios, situándose como el único escritor que opta al galardón en dos categorías.
Las obras seleccionadas en la categoría de poesía además de Vértices son Balada en la muerte de la poesía, de Luis García Montero; El ciclo de la evaporación, de Álvaro García; El mundo se derrumba y tú escribes poemas, de Juan Cobos Wilkins; Tiempo de charol, de Albert Torés; Horizonte interior, de Juvenal Soto; Ajuste de cuentas, de Francisco Domene; Blanco en lo blanco, de Adrián González da Costa; Dióxido de carbono, de Juan José Vélez Otero; y Las proximidades, de Concha García.
En la otra categoría donde es finalista, Onieva competirá con los títulos La vuelta al día, de Hipólito G. Navarro; Todos estaban vivos, de Javier Bozalongo; Ecos en el páramo, de Ángeles Mora; y Voces para un tímpano muerto, de Miguel Ángel Zapata.
Por otra parte, El azar y viceversa, de Felipe Benítez Reyes y Apóstoles y asesinos, de Antonio Soler; Boabdil, el príncipe del día y la noche, de Antonio Enrique; El gran imaginador, de Jacinto Muñoz Rengel; y Señora con perro, de Rafael Mir Jordano, son las obras finalistas que optan al premio de mejor novela.
El ganador de cada apartado recibirá una escultura de la artista cordobesa Marta Campos. El fallo del jurado se anunciará el primer fin de semana del mes de marzo, cuando un jurado compuesto por 20 profesores, críticos literarios y periodistas elijan en una reunión que este año se celebrará en Málaga las que supuestamente serán las obras andaluzas más relevantes de la pasada temporada.
Otros premios
Le sigue deparando alegrías a Onieva sus obras ya que el pasado mes de junio, Onieva se alzaba con el XXVI premio de poesía Jaime Gil de Biedma por su poemario Vértices, donde el jurado destacó como «el libro de la emoción» tildándolo de un trabajo de «impecable factura». “Es un canto al amor y a las cosas sencillas, a las cosas más cotidianas”, indicó por aquel entonces el portavoz del jurado, Gonzalo Santoja.
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