Amanece hoy un nuevo Lunes Santo, un Lunes santo que no era el que todos esperábamos. Hoy no hay incertidumbre por ver cómo estará el cielo, de hecho poco o nada importa la meteorología en estos días de confinamiento. Hoy las hermanas clarisas de Santa Clara de la Columna no recibirán nuestra visita, pero seguro que siguen acordándose de nosotros y en cuanto se pueda devolveremos, con nuestra visita, esa oración que constantes hacen cada día. Hoy no hay nervios de última hora, ni hay que repasar todo lo que quedaba por terminar, hace algunas semanas que se quedó todo por hacer. Hoy la glorieta de San Gregorio no se viste de gala ni presenta el bullicio y la algarabía de una barrio que vive su día grande, se viste de SILENCIO y así vacía evidencia la responsabilidad de todos.
Nos hemos enfrentado a una Cuaresma desconocida para todos, casi sin ensayos de costaleros, con poquitas horas de casas de hermandad, sin cultos a nuestros titulares, sin Via Crucis, sin incienso en la calle, casi sin convivencia con los hermanos y amigos pero recordemos que la primera cuaresma la vivió Nuestro Señor y fueron cuarenta días en la soledad y el SILENCIO del desierto.
Hoy toca encarar a un Lunes Santo sin flores, sin bandas, sin fajas, sin capirotes, sin cirios, sin celebración de la palabra en una abarrotada ermita o sin Eucaristía que prepare nuestro corazón desde por la mañana. Pero no dejemos que el lamento de todo lo que este “inoportuno visitante” nos ha quitado, nos arrebate también lo que solo depende de nosotros y de nuestra relación con Nuestros Titulares.
HOY ES LUNES SANTO y así lo tenemos que vivir, abramos nuestro corazón a Dios, abracémonos cofrades con nuestra oración, por teléfono, por whatsapp… cambiemos el anonimato del antifaz por el anonimato del rincón de nuestra casa y hagamos estación de penitencia, elevemos nuestra oración, “nuestro Dios que ve en lo escondido nos lo recompensará”.
HOY ES LUNES SANTO y se necesita más que nunca SALUD, y los Lunes Santos, y todo el año, Pozoblanco sabe dónde encontrarla, Ella hoy tiene muchos “Risquillos” que subir, Ella hoy nos tiene, más que nunca, suplicantes a sus pies y os aseguro que más que nunca nos lleva de la mano en estos momentos que tanto recurrimos a Ella. Hoy la SALUD DEL LEGÍO ha dejado su ermita y su barrio para salir a los hospitales, ha salido a devolver la visita de los que viven y trabajan en las residencias de ancianos y que cada Lunes Santo la visitaban, está en cada casa, en cada familia y en cada persona que siente el peso de la soledad y llegará a cada rincón donde se le invoque porque “jamás se oyó decir que ninguno de los que han acudido a ti, haya sido abandonado”
HOY ES LUNES SANTO. No nos permitamos el lujo de vivirlo sin Jesús del Silencio y María Santísima de la Salud. Unámonos a su Pasión en estos momentos de agitación, vivamos con la esperanza de volver a cumplir lo soñado pero viviendo activamente el presente. Vivamos intensamente el Triduo Pascual y experimentemos el estallido glorioso y luminoso de la Pascua en nuestras vidas.
Feliz Lunes Santo y Feliz Pascua de Resurrección.
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