- El Ayuntamiento de Pozoblanco se suma a las muestras de repulsa por el caso ocurrido en el día de ayer en Baena
El sábado, las calles de Madrid se inundaron de una marea que pidió el cese de la violencia machista. Una marcha que aglutinó a miles de personas en la que fue la primera marcha nacional contra este tipo de violencia. La comarca de Los Pedroches estuvo muy presente en esta iniciativa y asociaciones como Ventana Abierta o «Candela» de Hinojosa del Duque acudieron hasta la capital para sumarse a esta marcha en la que también estuvieron muchos ciudadanos de Los Pedroches. 
La marcha comenzó a las 12:00 horas y partió desde el Ministerio de Sanidad donde se leyó por primera vez un manifiesto donde se destacó que «desde el año 1995, 1.378 mujeres han sido asesinadas por el terrorismo machista. En lo que llevamos de año se han contabilizado 70 feminicidios y otros asesinatos de mujeres cometidos por hombres: solo en el verano de 2015 han sido asesinadas 37 mujeres y 8 menores a manos de sus parejas, padres o parejas de sus madres. Mujeres y menores sufren violencia patriarcal en múltiples formas. Y esto sólo es la punta del iceberg».
«En los últimos años hemos padecido los recortes sistemáticos en los recursos públicos generales, en los derechos sexuales y los derechos reproductivos, recortes en la interrupción voluntaria del embarazo de las menores de entre 16 y 17 años y recortes en los recursos especializados contra las violencias machistas. La cultura patriarcal nos culpabiliza sin que la sociedad, los medios de masas y los poderes públicos se enfrenten a los mitos misóginos y anti feministas», proseguía el manifiesto.
La marcha siguió hasta la Cibeles para posteriormente abordar la Gran Vía y finalizar en la Plaza España. Fue una jornada donde se dio un grito unánime contra la violencia de género que horas después volvería a engrosar las cifras con tres nuevas víctimas en la jornada del domingo.
Repulsa por el caso ocurrido en Baena
Uno de esos casos tuvo precisamente lugar en Baena donde un hombre habría matado supuestamente a su mujer y después se habría suicidado. Este hecho, ha provocado que numerosos ayuntamientos de la provincia condenen este acto con cinco minutos de silencio. Ha sido el caso de Pozoblanco donde concejales y ciudadanos han vuelto a condenar la violencia de género.
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