El proceso electoral en el que está inmerso el Club Deportivo Pozoblanco fijaba la finalización del plazo para la presentación de candidaturas en el día de ayer. Tras unas semanas de intensos rumores que hablaban hasta de dos proyectos, finalmente el plazo expiró con la presentación de una candidatura que no se conformará como junta directiva, sino como junta gestora. Así lo ha confirmado a este periódico el hasta ahora presidente de la entidad, José Antonio Bravo.
Una fórmula que levanta algunas dudas ya que la figura de la junta gestora, según reflejan los estatutos de la entidad, se puede crear por los miembros de la junta directiva saliente. Sin embargo, y según fuentes federativas, sería posible la configuración como junta gestora en el caso de dimisión de toda la junta directiva anterior. No obstante, y conscientes de que esta situación podía ser un escollo, el grupo de personas que darán continuidad al proyecto del Pozoblanco remitieron a Bravo un documento articulando una hipotética junta directiva.
Al parecer, las dificultades para encontrar a una persona que encabezase el proyecto ha sido la razón esgrimida para que la candidatura no se presente como se esperaba, con la figura de presidente y el resto de cargos. En relación al grupo, se trata de personas ligadas con el Pozoblanco por diferentes vías, ex jugadores, entrenadores y padres de jugadores de diferentes categorías.
Se espera que a lo largo de la semana próxima, el grupo que a partir de ahora se hará responsable del futuro del Pozoblanco avance su composición, así como los derroteros que tomará el proyecto que encabezarán.
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