El pasado 10 de marzo se constituía la Asociación de Hosteleros de Pozoblanco, HOSTEPOZO, contando en la actualidad y tras unas semanas de vida con veintiún asociados aunque sus perspectivas están en superar los sesenta. Los pasos para su constitución no han sido fáciles por cuestiones intrínsecas del sector que han provocado que cada uno «batallase por su cuenta». Ahora, parte de los hosteleros se unen para «dar un salto de calidad» y para hacer frente de manera conjunta a las problemáticas del sector, que no son pocas. Hablamos con el presidente y vicepresidente de la recién formada Asociación, Miguel Ruiz y Luisma Luna, respectivamente.

Pregunta: ¿En qué contexto nace la Asociación Hostepozo?

Luisma Luna: La Asociación de Hostelería de Pozoblanco nace en un contexto donde la crisis está azotando con más fuerza si cabe a esta zona, más que nunca antes y sobre todo de un sentimiento de unión y de hacer fuerza. Nace para marcar tendencia, actualizar un poco la hostelería de Pozoblanco y para luchar por los derechos de quienes nos dedicamos a este sector en nuestra localidad.

P: ¿Qué pasos se han dado hasta su constitución? ¿Ha sido fácil?

L.L.: No han sido pasos fáciles porque hay mucha hostelería y muy variada. Es muy complicado poner de acuerdo a ciento diez entes de una localidad, siempre hay que gente que se ha movido más. En la primera reunión conseguimos reunir a cerca de cuarenta hosteleros, realizamos una Asamblea y partiendo de ahí se aprobaron los estatutos y se constituyó la Asociación. Pero no ha sido fácil llegar a este punto.

El primer objetivo es aumentar el nivel de la hostelería que hay en la localidad y dar un salto de calidad hacia algo

P: ¿Es en esa primera Asamblea cuando queda constituida la Asociación y se procede a la elección de los correspondientes cargos?

Miguel Ruiz: No, fue en una segunda. En la primera nos juntamos cerca de cuarenta hosteleros y ya en la segunda hubo bastante más y ya ahí se leyeron los estatutos, se aprobaron y se procedió a la elección de presidente, vicepresidente, secretario y cinco vocales.

P: Centrándonos en su razón de ser, ¿cuáles son los objetivos con los que nace Hostepozo?

L.L.: El principal objetivo es el de poner a Pozoblanco en el lugar que le corresponde en el sector de la hostelería. ¿Cómo se consigue? Pues a través de la asociación en materia de formación, asesoramiento y en materia también de buscar ayudas de organismos públicos, en la realización de cursos de formación, etc. El primer objetivo es aumentar el nivel de la hostelería que hay en la localidad y dar un salto de calidad hacia algo, que quizás en los últimos tiempos, se ha visto deteriorado.

P: Han mencionado la crisis como una de las principales problemáticas del sector pero, ¿qué otras dificultades acucian a la hostelería concretamente en Pozoblanco?

L.L.: Hay varias. Una de ellas es la falta de continuidad debido a la cantidad de cosas, actuaciones y actividades que se hacen al margen de la hostelería y que cortan mucho la continuidad. La hostería es de costumbre, los bares son de costumbres, los restaurantes también y la cantidad de eventos paralelos que se realizan cortan esa dinámica de creación de puestos de trabajo y de continuidad. Si un fin de semana hay algo pues no pasa nada, pero si estos eventos son continuos, automáticamente el negocio deja de producir y te impide hacer mejoras, contratar más personas e innovar.

El invierno es muy duro para el sector, muy duro. Cuando llega el verano todos los fines de semana tiene que haber un evento, justo en la época en la que los negocios pueden resurgir.

P: Parece muy complicado acabar con esa dinámica, ¿le han transmitido esta inquietud al Ayuntamiento?

M.R.: Muchas veces, pero nadie quiero coger la sartén por el mango. No sabemos por qué. Se lo hemos transmitido por activa y por pasiva.

P: ¿Cuál es la argumentación a la hora de plantear esta cuestión?

M.R.: El invierno es muy duro para el sector, muy duro. Cuando llega el verano todos los fines de semana tiene que haber un evento, justo en la época en la que los negocios pueden resurgir. No te voy a decir que no haya negocios que funcionen, pero si todos los fines de semana hay algo, siempre alguno sale perjudicado.

P: ¿Qué soluciones se pueden poner encima de la mesa?

M.R.: Eso es lo que pretendemos, buscar soluciones a este tema y a otros y que esas soluciones no vayan ni en contra de unos ni a favor de otros.

L.L.:Es una cuestión que hemos abordado en varias ocasiones. No se pretenden eliminar, ni denunciar una serie de hechos, simplemente que se nos vea como los verdaderos promotores de esos eventos. Para eso hay una Asociación, una Junta Directiva a la que cualquier ente privado, asociación, ente deportivo, se puede dirigir para hacernos partícipes de sus necesidades. Partiendo de esa base, este tipo de entes podrán presentar un servicio de mayor calidad, generar una imagen más positiva y creo que es una de las actuaciones que puede ser básica de aquí en adelante. La típica barra de chapa, por ejemplo, que esté gestionada por un profesional que pague sus impuestos, sus autónomos, que tenga sus trabajadores en regla, lo que requiere básicamente una actividad económica, que a fin de cuestas es lo que son. No se trata de que la gente nos vea como algo para eliminar o destruir, sino para dar un salto de calidad tanto en este tipo de actuaciones como en otras que promoverá la propia Asociación.

P: ¿Cuáles son las acciones más inmediatas que van a llevar a cabo?

M.P.: Lo primero que hemos hecho ha sido mandarle un saluda al alcalde de Pozoblanco, a los medios de comunicación y a cada uno de los ciento diez establecimientos de la localidad. Nos tienen que perdonar si no nos hemos puesto en contacto con todos pero a partir de ahora recibirán esa carta con su boletín de adhesión a la asociación. Esta semana nos reuniremos para dar los primeros pasos. También está previsto mandar una carta al Ayuntamiento firmada por todo los socios.

P: ¿En qué línea irá esa misiva?

M.P.: Vamos a mostrarles nuestras quejas por las problemáticas que hay y mostrarles nuestra ayuda para ver si juntos podemos buscar soluciones.

 No se trata de que la gente nos vea como algo para eliminar o destruir, sino para dar un salto de calidad tanto en este tipo de actuaciones como en otras que promoverá la propia Asociación.

P: ¿Cuántos socios hay en la actualidad y qué cuotas se han establecido?

L.L.: De momento somos 21. De aquí en adelante abrimos las puertas para todos los interesados en asociarse. Habrá una cuota de apertura de 30 euros para los gastos que conlleve la propia constitución. El resto de meses se abonarían 10 euros por mes y es una cuota que está limitada a sociedad y establecimiento. Es muy complicado reunir a entes que hasta ahora han estado batallando por su cuenta y hay que empezar por lo pequeño y ahora abrimos a todos los establecimientos de la hostelería de Pozoblanco.

P: Quizás en ese punto habría que hacer algo de autocrítica, el ir cada uno por su lado. 

M.R.: Lo hemos hablado en todas las reuniones. Aquí hay piques de unos con otros y ya ha llegado la hora de unirnos para ponernos de acuerdo y si alguien tiene un pique que lo aparque porque lo que importa es el conjunto de la hostelería y tenemos que ir todos juntos. Creo que tendremos los sesenta asociados.

P: Por último, el motivo de no incluirse en otras Asociaciones ya existentes ¿se debe a tener objetivos más específicos?

L.L.: Exacto. Si te refieres, por ejemplo a Adepo, no es que haya un conflicto de intereses. Adepo tiene unos intereses creados porque no solo trabaja con el sector de la hostelería. Los problemas de la hostelería los tienen que resolver los propios hosteleros y no depender de otra Junta Directiva y que sea quien aporte soluciones. Adepo tiene sus fines enfocados al comercio y empresarios en general y por el número de los que somos creemos que la hostelería necesita un trato específico mucha más atención.