Complicado pero no imposible. En esa tesitura se encuentra un Balonmano Pozoblanco B que el pasado sábado disputó el partido de ida de las semifinales por el ascenso a Segunda Nacional y que ahora tendrá que evocar a la épica para conseguir darle la vuelta al 31-20 que registró ese partido. El equipo pozoalbense vivió una auténtica encerrona en su partido ante el Balonmano Adra y ahora apelan al apoyo de la afición para dar un paso más en la consecución de su objetivo.

La diferencia de nueve goles no habla de la superioridad de un equipo porque los almerienses no demostraron estar tan por encima del cuadro de Pozoblanco. Y es que los jugadores blanquillos se quejaron amargamente de la actuación arbitral que dejó un bagaje aún más interesante: 2 excluidos del lado local frente a las 14 sanciones de dos minutos que vio el Balonmano Pozoblanco B, además de sufrir dos descalificantes.

Aunque el cuadro vallesano lo intentó, los veintiocho minutos que tuvo que jugar en inferioridad pesaron demasiado y su rival aprovechó para tomar una renta cómoda para afrontar el partido de vuelta. Los colegiados de la contienda no tardaron en empezar con su aluvión de exclusiones, ya que en el minuto 5 el conjunto blanquillo tuvo que afrontar la primera en contra.

El sábado 5 de abril a las 18:30 horas, el equipo pide el apoyo a la afición para darle la vuelta a la eliminatoria.