Los trabajos arqueológicos que se están desarrollando en el Castillo de Belalcázar para profundizar en la historia de este enclave están dando sus primeros frutos. La delegada de Cultura y Patrimonio Histórico, Cristina Casanueva, visitó ayer martes la evolución de estos trabajos que se están realizando con presupuesto de 62.488.39 euros y que están dirigidos por el arqueólogo Manuel Cobo, de la empresa Salsum Tur SLL, por el arquitecto técnico Miguel Ángel Izquierdo Misa y ejecutados por la empresa constructora local Construcciones Manuel Maya.
Durante la visita, la delegada apuntó que «esta actuación ha permitido localizar el arranque del pórtico que define un patio en la plaza de armas con los basamentos y cimentaciones de apoyo de todas las pilastras de las crujías porticadas norte, oeste y sur, constituyendo la propia Torre del Homenaje el límite este el patio». Además, los trabajos realizados hasta la fecha han arrojado que existen restos ‘in situ’ de los pavimentos originales de las galerías y puntualmente del patio, conformado por losas de granito. En las partes donde se ha perdido la solería, se conservan las camas de mortero de apoyo de la misma. Igualmente se va a excavar la colmatación del aljibe central del patio.
Por otro lado, se ha podido comprobar la existencia de una planta subterránea anexa a la galería occidental. La actuación seguirá su curso ya que su finalización está prevista para mediados del próximo mes de diciembre. La delegada resaltó que la Plaza de Armas del interior del Castillo es la «gran desconocida por la acumulación superficial de escombros o rellenos que impiden visualizar las estructuras o pavimentos originarios subyacentes, por lo que la Consejería de Cultura y Patrimonio ha promovido esta actuación para fomentar la difusión y el conocimiento del patrimonio, ponerlo a disposición de todos los ciudadanos, así como facilitar al visitante la comprensión de este amplio espacio interior del castillo».
Todos estos trabajos permiten recuperar la esencia de un Castillo que ya se ha podido visitar tras los trabajos de rehabilitación de la Torre del Homenaje, la más alta de la Península.
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