La Guardia Civil investiga la muerte de una pareja tras hallar los cadáveres en el interior de una vivienda de Pozoblanco situada en la calle Góngora. Los primeros indicios apuntaban a un nuevo caso de violencia de género, algo que ha confirmado el alcalde de la localidad, Pablo Carrillo, tras hablar con el juez que ha llevado las diligencias que ha confirmado también que no se decretará el secreto de sumario. La víctima, M.A. S.L. , de 47 años de edad habría muerto a manos del que era su pareja, J.F.P, de 37 años de edad que confesó el crimen a la hermana de la víctima cuando ésta se personó en la vivienda.
A las 18:15 horas, la Policía Local recibió la llamada de alerta de la hermana de la víctima que había acudido a la vivienda junto a su marido tras ser alertada por compañeras de trabajo de su hermana ante la ausencia de la misma. Una vez allí, el presunto autor del crimen le espetó que había asesinado a su hermana y la echó de la vivienda. Tras estos hechos, se alertó a la Policía Local que junto a efectivos de la Guardia Civil se presentaron en el inmueble entrando a la casa armados ante la posibilidad de que el agresor estuviera con vida, tal y como había relatado la familiar que había alertado de la situación.
Una vez en el interior, descubrieron el cadáver del presunto agresor, que acababa de quitarse la vida, en el salón mientras que el de la víctima se encontraba en la cocina, muertes que ratificaron los servicios médicos que acudieron al lugar de los hechos. Hasta allí también se desplazaron efectivos de la policía judicial y científica que han estado hasta las diez de la noche recabando pruebas para la investigación. Aproximadamente a esa hora tenía lugar el levantamiento de los cadáveres que han sido trasladados hasta el Anatómico Forense de Córdoba para practicarles las correspondientes autopsias.
Aunque no se ha determinado la causa de la muerte, al parecer el supuesto agresor habría matado a su compañera sentimental con un arma blanca, que utilizó posteriormente para quitarse la vida. La víctima no había presentado ningún tipo de denuncia con anterioridad denunciando malos tratos. Esta muerte viene a ser la tercera por violencia de género en lo que va de año y la segunda en Pozoblanco en poco más de medio año, ya que en junio se registró otro caso en la localidad.
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