Las calles de Pozoblanco se llenaron ayer de gente para ver el paso de la procesión del Corpus Christi, que recorrió la localidad a partir de las ocho de la tarde. Fueron numerosos los altares que se pusieron en cada una de las calles por las que pasó una procesión que contó con la representación de todas las Cofradías de la localidad.

La Asociación de Antiguas Alumnas del Colegio «La Inmaculada» se estrenó como parte de la comitiva con un estandarte dedicado a la fundadora de la congregación, la Santa Carmen Sallés. De nuevo fueron los niños y niñas que este año han recibido la primera comunión quienes abrieron el cortejo, que cerró la Banda Municipal de Música.

Una procesión que congregó a numerosas personas tanto en sus filas como fuera de ellas.