Otro derbi provincial para el Pozoblanco, que vuelve a la competición tras un fin de semana en blanco por la suspensión del partido frente al Cartaya por motivos meteorológicos. La vuelta a la acción será ante el Atlético Espeleño en un derbi que sentará a dos entrenadores en el banquillo que fueron compañeros sobre el césped e incluso técnico-jugador ya que Juan Carlos Quero dirigió a Alberto Fernández en la última temporada como jugador de este último. 

El técnico del Pozoblanco no dudó en afirmar que es su rival el que llega mejor al partido por haber tenido más continuidad. «Ellos llegan bien después de ganar al Internacional Dos Hermanas, ganaron merecidamente después de contrarrestar una situación complicada», aseguró. Tampoco valoró Fernández la evolución de un equipo que «ahora es más rocoso que al inicio de liga, hay que tener en cuenta la seguridad defensiva de Óscar y Edu, sin olvidar la calidad de Iván Sánchez y Adrián». 

A todos esos ingredientes, el preparador añadió el peligro del Atlético Espeleño a balón parado con Iván Sánchez como protagonista, algo en lo que llevan trabajando toda la semana para contrarrestarlo. Por otro lado, valoró que «es un equipo que se hace fuerte en casa, presiona muy bien», aunque los suyos irán con «ganas de ganar, conceder muy poco y aprovechar las ocasiones que tengamos». 

A pesar de que ambos equipos se conocen a la perfección, el preparador pozoalbense deja margen para la sorpresa porque «al final el que juega es el futbolista y ambos equipos tienen jugadores que por sí solos son capaces de decidir un partido, futbolistas que pueden cambiar la dinámica de un partido». 

Alberto Fernández ha preparado el partido en una semana «atípica» después de no haber jugado la semana pasada. «El lunes suele ser un día para descansar y lo hemos tenido que convertir en otra cosa. Hemos modificado la semana, incluso metiendo el sábado para entrenar, hemos bajado la carga de cara al final de la semana, pero hemos sumado más minutos porque nos viene mal estar tanto tiempo sin competir», explicó. Respecto a las bajas, la única duda será Ángel García que llegará «entre algodones» al partido, además de la ya conocida de Iker. 

Partido aplazado

Por otro lado, el Pozoblanco ya sabe cuándo jugará el partido aplazado contra el Cartaya ya que ambos equipos se han puesto de acuerdo para disputar ese choque el día 31 de octubre a las 20:30 horas. El acuerdo entre ambas entidades ha evitado la entrada de oficio de la Federación Andaluza, que hubiera fijado el partido en la jornada del 1 de noviembre.